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Macaya y crisis por Penta: Estalló en nuestras manos como una ola imposible de predecir

El presidente saliente de la UDI recordó que desde el primer momento defendieron la presunción de inocencia y criterios claros que hoy son compartidos por quienes los atacaron "sin contemplaciones".

10 de Abril de 2015 | 18:21 | Por María Cristina Romero, Emol
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Héctor Flores, El Mercurio

SANTIAGO.- En su último discurso como presidente interino de la UDI, el diputado Javier Macaya, manifestó su disposición a seguir participando en la colectividad y se refirió a la crisis generada por el caso Penta, reconociendo que estalló en sus manos "como una ola gigante imposible de predecir".


Agregó que la actual es "una de las peores crisis políticas que ha tenido que enfrentar la UDI y que se extiende hoy a la mayoría de los partidos políticos, amenazando seriamente la institucionalidad de Chile".


En esa línea, el diputado indicó que "advertimos desde el día uno que se avecinaban momentos complejos, que estaban en peligro las bases de nuestra institucionalidad, condenamos desde el día uno los juicios anticipados, las filtraciones, los linchamientos públicos".


Y enfatizó que "defendimos la presunción de inocencia y establecimos criterios claros y objetivos, que aunque no estuvieron exentos de críticas o pudieron parecer impopulares, hoy son compartidos incluso por quienes nos atacaron sin contemplaciones durante los primeros meses, los mismos que pretendieron que la UDI fuera un símbolo exclusivo de corrupción e irregularidades".


Asimismo Macaya recordó que en enero pasado pidieron disculpas "públicas y asumimos  que aunque las responsabilidades son individuales, estábamos frente a un problema que requería una respuesta institucional", recordando que el momento más doloroso fue la renuncia de Ernesto Silva como presidente.


"Le digo a aquellos que dicen que la UDI está al borde la destrucción que están profundamente equivocados y que lo vamos a demostrar en la calle, con la gente, haciendo oposición y ganando elecciones", expresó.


A su juicio, las crisis siempre son oportunidades para reinventarse y crecer, por lo que "la UDI no puede permanecer inmóvil, debe recuperar  su sello, debe volver a las bases, debe recuperar en terreno la credibilidad perdida".


Finalmente, Macaya dijo sentirse orgulloso de haber sido secretario general y presidente del partido por "más adversos y difíciles que hayan sido los momentos", añadiendo que espera en el futuro "seguir sirviendo a Chile, a través de la UDI, en la posición en que se me requiera".

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