Parvularia es condenada a un año de presidio remitido por muerte de menor en un auto

SANTIAGO.- El Segundo Tribunal de Garantía de Santiago condenó esta mañana a la parvularia Eugenia Riffo Tapia a la pena de un año de presidio remitido (en libertad) y a dos bajo la supervisión de Gendarmería, por la muerte del pequeño Borja López Ojeda, a quien olvidó al interior de su auto frente al jardín infantil "Mandarino" de Huechuraba, en octubre de 2010.

La decisión fue tomada por el juez Rodrigo García, luego que el fiscal Centro Norte José Morales cambiara la calificación jurídica del delito de homicidio por omisión a cuasidelito de homicidio, debido -según explicó- a que no se encontró dolo en su actuar, sino que más bien una negligencia extrema.

Morales agregó que para la recalificación se tomó en cuenta la irreprochable conducta anterior, la colaboración sustancial de Riffo en el proceso y que de acuerdo a las declaraciones de más de 25 testigos, tras el hallazgo del menor la mujer reaccionó de forma histérica, lo que no se condice con un homicidio por omisión. "Simplemente se olvidó del menor", aseveró.

En la audiencia de hoy estuvieron presentes los padres del pequeño, Pablo López y Denisse Ojeda. Ésta última lloró especialmente cuando el fiscal, el juez o el abogado querellante Alfredo Morgado narraron la forma en que se produjo el deceso del niño en la tarde del 19 de octubre pasado.

Morgado se opuso a la solicitud del fiscal, señalando que hubo incoherencias en el relato de la imputada y que esta tuvo un actuar doloso al dejar al menor en el auto, pues tuvo tiempo para volver varias veces a éste para buscar mochilas y su cartera.

También anunció que estudiará, junto a los padres de Borja, una posible apelación al fallo del juez García.

Inconformidad

"¿Matas a un niño y estás sólo dos días detenido?", preguntó esta mañana Pablo López, tras conocer el dictamen del juez.

"El fiscal nos había avisado a través de nuestro abogado, pero nos opusimos, porque hay muchas incoherencias. Ella nunca se ha acercado a nosotros para pedirnos perdón. No es lo que esperábamos", agregó visiblemente afectado.

Por su parte, Denisse Ojeda dijo entre lágrimas que "como madre una nunca va a estar conforme con esta resolución. Cuando leían lo ocurrido ese día pensaba en mi hijo y en que no iba a estar nunca más con él".

En tanto el abogado de la parvularia, Andrés Biggs, dijo que su representada se encuentra muy afectada y que no ha vuelto a ejercer la profesión tras lo ocurrido.