PARIS.- La acción de los "hackers", piratas informáticos de la red, provocó el cierre de un sitio neonazi que se salvó de la clausura en un proceso judicial, informó hoy el diario "Liberation".
El portal
front14.org, que se denominaba como "lo mejor del odio en línea", no está disponible en la red desde hace varios días, aunque el proveedor en el que se albergaba asegura no haber tomado ninguna medida en contra de la página neonazi.
Según "Liberation" hay "varios elementos que invitan a pensar" que el portal "ha sido destruido a distancia, algo posible con técnicas un poco sofisticadas de 'hacking' (pirateo)".
El diario cita varios foros de discusión en los que los internautas reivindicaban la destrucción a distancia del sitio neonazi.
El 30 de octubre pasado, un juez especializado en cuestiones de Internet reconoció que el contenido de
front14.org era ilegal e instó a los proveedores a evitar la entrada en la página, pero en el estado actual del derecho, no pudo impedir que continuaran albergando el sitio.
La actuación del juez, que se produjo a instancias de diversas organizaciones francesas de lucha contra el racismo, se limitó a pedir a los proveedores (la sociedad estadounidense SkyNetWeb) que tomaran medidas "conforme a los medios técnicos existentes" para evitar el acceso a una página ilegal.
Los responsables de SkyNetWeb no han hecho nada y se han limitado a comunicar que los responsables del sitio neonazi "han hecho las maletas y se han ido".
Según el abogado estadounidense experto en derecho en la red Wendy Leibowitz, "una empresa de Estados Unidos que no tiene actividad en Francia puede ignorar un mandato francés", puesto que "Internet está en todas y en ninguna parte, y desafía las jurisdicciones nacionales".
Ante el vacío legal que existe en este campo, los internautas han optado por la "auto-justicia", según "Liberation".
El próximo año, la Asamblea francesa examinará un proyecto de ley sobre la sociedad de la información que, según el diputado socialista y ponente Patrick Bloche, deberá "preservar la libertad de expresión introduciendo una noción de responsabilidad de los servidores de Internet".
