LCD y plasmas: lo más indicado para la televisión digital

SANTIAGO.- Ante la inminente decisión de la norma digital, muchos están confundidos sobre los televisores que serán necesarios para recibir la señal que en el futuro no tan próximo, empezará a emitirse en Chile.

Los televisores más modernos (al menos los disponibles en Chile) son los llamados LCD y los Plasma, ambos son mejores aparatos para recibir la señal digital, pero ojo, que la mayoría no vienen listos de fábrica. Al igual que cualquier otro hay que conectarlo a un decodificador para poder ver la televisión digital.

Al respecto, Miguel Ríos, experto de DICTUC y docente UC, se apresura en dejar claro que “cualquier televisor, análogo o digital, es capaz de mostrar las imágenes recibidas en forma digital, siempre que se disponga del sistema decodificador del estándar seleccionado. En tal sentido estos televisores funcionan sólo como pantallas de despliegue”.

Eso sí, en un LCD o Plasma, las imágenes digitales sí se podrán apreciar en alta definición, no así, en los clásicos televisores de tubos catódicos.

El mejor postulante

Tanto el LCD como el Plasma, cuentan con una tecnología que los hace ideales para poder apreciar las bondades de la televisión digital en toda su expresión.

Según Ríos, ambos “proveen los tamaños y resoluciones adecuadas para la presentación de programas de alta definición”.

Coincide con él Víctor Aguilera, gerente de marketing de Panasonic, ya que “en términos de resolución todos los plasmas y LCD son compatibles, pero todos (los que se venden actualmente en el país) requieren un decodificador”.

Sin embargo, tienen sus diferencias.

Miguel Ríos explica que las pantallas LCD usan una tecnología conocida como TFT (Thin Film Transistor) que permite fabricar pantallas planas de menor profundidad, menor peso y menor consumo energético. Esta tecnología también es la más utilizada en los monitores de computadores.

“La tecnología LCD se basa en las propiedades de la luz polarizada. Dos paneles delgados polarizados encierran un gel delgado de cristal líquido, el que se divide en pixeles individuales. Un arreglo X-Y de alambres permite activar en forma individual a cada píxel. Cuando se aplica corriente, los cristales cambian su orientación y así dejan pasar más o menos luz dependiendo de la intensidad de la corriente. La luz proviene de la lámpara que está ubicada atrás del panel LCD”.

Por su parte, los plasmas contienen un panel en que numerosas celdas de pequeño tamaño (pixeles), localizadas entre dos paneles de vidrio, contienen una mezcla inerte de gases nobles (neón y xenón). “El gas de cada celda mediante la aplicación de electricidad se convierte en plasma, el que luego excita los fósforos de la pantalla para emitir luz. Cada pixel consta de 3 sub-pixeles que están llenos de gas y recubiertos de fósforo rojo, verde y azul respectivamente. Al recibir impulsos eléctricos (independientemente cada uno), el gas en estos sub-pixeles se activa e ilumina el color que está detrás”.

Esto implica que en el uso hay algunas más recomendadas para ciertas actividades. Por ejemplo, las pantallas LCD se usan mucho para los computadores, pantallas de celulares y otras pequeñas.

Por su parte, los plasmas son ideales para ver deportes, por ejemplo, porque tienen una mejor reacción de movimiento. “El plasma tiene más velocidad para seguir imágenes rápidas sin “fantasmas”. Tiene una reacción de 3.5 milisegundos ante cambio de imagen, mientras el LCD entre 6 y 8 milisegundos” explica Aguilera de Panasonic.

La durabilidad es parecida, sobre 60 mil horas, o sea 20 años ocupando 8 horas diarias.

Cambiar el viejo aparato

La principal gracia de la televisión digital, en lo que a imagen respecta, es su gran nitidez y calidad, con una alta definición.

Pero si usted sigue utilizando un televisor común y corriente (mejor conocidos como televisores de rayos catódicos), perderá las ventajas de la imagen que le brinda la televisión digital. Y esa, es la mejor razón para comprarse un aparato acorde a la calidad.

Sergio Godoy, académico de la Facultad de Comunicaciones de la Universidad Católica, y experto en el tema, explica que “la tecnología de la pantalla es diferente del estándar. LCD, plasma o rayos catódicos se pueden utilizar con TV digital y esto tampoco influye en la discusión sobre la norma”.

Pero no se apure. El estándar ni siquiera se ha decidido, y una vez que se haga, quedan años para que su viejo televisor de rayos catódicos deje de ser útil, aún sin decodificador.

“La introducción de la Televisión Digital Terrestre, incluye un período de transición de varios años en que se continúa transmitiendo televisión en la forma analógica. Es decir, durante varios años, el televidente puede optar por seguir viendo sus programas en su televisor sin cambiar nada de lo que actualmente hace”, explica Miguel Ríos.

Es así que quienes quieran ver la televisión de siempre, esa que reciben mediante la antena, no tendrán problemas, al menos hasta que se haga el “apagón analógico”, o sea, cuando la televisión abierta que conocemos, deje de transmitirse. Pero eso debería suceder en muchos años más.

Y para quienes sí quieren ver televisión digital, pero no puedan comprarse una televisión más moderna, con un decodificador basta.

¿Comprar o esperar?

Hasta que se tome la decisión de la norma, quienes quieren renovar sus televisores no saben si esperar o comprar de inmediato, considerando que de todas formas serán útiles, sea cual sea el estándar que se elija.

Para Miguel Ríos, “esta es una decisión puramente económica. Los costos de los televisores digitales han venido bajando significativamente en los últimos años”.

Explica que el costo actual en Chile de un televisor de 32 pulgadas es menos de la mitad de lo que era hace un año, variando entre $300.000 y $500.000. Además, “el costo de un decodificador para el estándar seleccionado se estima entre $75.000 y $150.000 (dependiendo de las prestaciones incluidas). Independientemente de estos costos, cada televidente tendrá que invertir recursos en una instalación de antena externa de buena calidad, lo que se estima involucra un costo adicional significativo”.

Sergio Godoy considera que “lo prudente es esperar. O que asuma que si lo compra después tendrá que volver a invertir una suma aún desconocida por el decodificador”.

La industria en todo caso, está preparada y es uno de los sectores que con más ansias espera la decisión sobre la norma para poder importar los televisores ya adaptados y mejorar la oferta.

Aún así, la venta de pantallas LCD y Plasmas ha aumentado de manera impresionante. Según un informe de Panasonic, las ventas crecieron un 500% entre julio y diciembre de 2007. De hecho. “el 30% de venta en televisores se da en plasmas y LCD”, dice Víctor Aguilera.

Rodrigo Choi, subgerente de digital media de Samsung Electronics, explica que en Chile no hay en este momento ningún televisor Samsung con alguna norma incorporada. Alguna vez “llegaron 2 o 3 modelos con ATSC, pero fue por tema de Line-up (en ese período, el modelo estaba sólo disponible en EEUU)”.

Pero la industria está preparada para la introducción de la televisión digital, ya que la mayoría de las marcas ya fabrica para diferentes partes del mundo, aparatos aptos para las tres normas existentes. “En cuanto el gobierno decida qué norma será la elegida, tendremos los productos con la norma en 2 o 3 meses por tiempo de producción y transporte, ya que los productos ya están disponibles”, agregó Choi.