SANTIAGO.- En la era de Internet, el acceso a los datos es muy amplio y casi cualquier tipo de información está a una búsqueda de distancia. Por eso, no es raro que apenas se siente un síntoma extraño, se recurra a Internet para buscar qué mal podría estar indicando.
Porque según un estudio realizado en España, 1 de cada 6 personas trata de encontrar información en la Red antes de ir al médico, mientras que 1 de cada 4 lo hace después de visitar la consulta del doctor, para confirmar o desmentir el diagnóstico que recibió.
Sin embargo, los pacientes no se dejan influir tan fácilmente por lo que encuentran en la web, y el médico sigue siendo el principal informador en materia de salud y es el que más confianza inspira, según este estudio realizado por la Universidad de Alcalá.
Aún así, el 73% de los encuestados dice que los resultados de su búsqueda en Internet los satisface y suelen encontrar la información que buscan en las primeras tres páginas que visitan.
Si bien los buscadores son la herramienta favorita para encontrar lo que necesitan, un 14.1% ha recurrido a herramientas 2.0, como blogs, foros o chats orientados a la información sobre la salud, de los cuales el 83.3% queda conforme con sus respuestas.
Cibercondria
Aunque parezca una herramienta útil y casi lógica, la búsqueda en Internet con respecto a posibles enfermedades puede provocar lo que se ha llamado como la "cibercondria", y según un estudio realizado en noviembre pasado por Microsoft, esto puede conducir a los usuarios a creer erróneamente que sufren enfermedades raras.
Google, Wikipedia y así como páginas especializadas en salud, contienen miles de datos que al estar al alcance de cualquiera, puede tener también desventajas, como incrementar las preocupaciones de los usuarios con respecto a la salud, por lo poco acertados que pueden resultar algunos diagnósticos basados en lo que se lee en la Red, y una simple jaqueca puede llevar a alguien a pensar que tiene un tumor cerebral.