Reuters
GINEBRA.- El Espectrómetro Alfa Magnético (AMS, por sus siglas en inglés), un instrumento capaz de detectar la antimateria y la materia oscura, ya está preparado en el aeropuerto de Ginebra para emprender su viaje mañana hacia el Centro Espacial Kennedy de la NASA.
"Es el primer experimento de gran tamaño y precisión espacial, temporal y de capacidad de identificación de radiación cósmica que va a estar en el espacio entre 15 o 20 años",
dijo el ex vicepresidente del Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN) Manuel Aguilar, que presenciará la salida del AMS a la Estación Espacial Internacional (EEI).
El detector AMS, que tuvo un presupuesto de dos mil millones de dólares, fue construido por un equipo internacional con contribuciones de varios países europeos.
A bordo de un avión de transporte Galaxy C5 de la Fuerza Aérea de EE.UU., un inmenso aparato que sobresale entre los aeroplanos comerciales del aeropuerto de Ginebra, el AMS volará mañana hacia Florida tras pasar quince años de gestación en el CERN.
Durante más de una década, un equipo de científicos de dieciséis países trabajó para poner en marcha el AMS, que examinará aspectos fundamentales sobre la materia y el origen del Universo directamente desde el Espacio.
Además, su principal objetivo científico será la búsqueda de la llamada "materia oscura", como se denomina al 23% del Universo aún sin detectar, "por medio de las 650 mini cámaras que alberga", según explicó Samuel Ting, premio Nobel en 1976 por descubrir la partícula subatómica y portavoz del experimento.
Aunque ha habido otros intentos a lo largo de los años y actualmente existen varios que buscan la llamada "materia oscura", la mayor peculiaridad del AMS es que "lo hará en el espacio durante un periodo de, al menos, 15 años".
