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Santiago: Viernes 26 de abril del 2024 | Actualizado 19:42
SANTIAGO.- Una propuesta amparada bajo el concepto de evolución en el mercado de autos solares es lo que plantea el equipo Ergon, del que forman parte Camila Villanueva y Fernanda Marambio, alumnas de la Universidad Técnica Federico Santa María, quienes dirán presente en el Atacama Solar Challenge con un prototipo que ahorra un diez por ciento de la energía, a través de un diseño aerodinámico que genera poco roce con el aire.
Según explica un comunicado de la casa de estudios, la idea es hacer competir el vehículo en el Desafío Solar Atacama, una de las dos categorías del Atacama Solar Challenge, la primera carrera de autos solares de Latinoamérica a desarrollarse en el norte de Chile, entre el 30 de septiembre y el 2 de octubre de 2011.
El evento que tiene por objetivo desarrollar energías alternativas para acercar la tecnología solar a los latinoamericanos y donde 32 equipos provenientes de 7 países de la región deberán recorrer 933 kilómetros con los mayores niveles de radiación solar del mundo, cruzando por las ciudades de Iquique, Calama, Antofagasta y Chañaral.
De resultar ganador, el equipo se llevaría un premio de 15 millones de pesos y la inscripción automática para el World Solar Challenge que se realiza en Australia, donde asisten los centros y universidades más especializados y avanzados en materia de energía solar.
En el área de diseño del automóvil, liderada por Rodrigo Torres, ex alumno de la casa de estudio, también se está trabajando junto a la Academia de Ciencias Aeronáuticas de la USM y a la Fuerza Aérea de Chile.
"De ahí surge la idea de diseñar un automóvil transgresor a lo que ya existía. Más allá de que sea diferente físicamente, es eficiente y eso es lo que importa, pues el mercado de los autos solares recién se está desarrollando y, por lo mismo, van surgiendo constantemente conceptos nuevos que permiten desarrollar principios para integrar posteriormente nuevas tecnologías a los diseños", plantea Torres.
Lo más complejo hasta ahora, reconoce el capitán del equipo, Rodrigo Pereira, fue la parte económica, pues "se trata de un proyecto millonario que necesita mucho financiamiento y auspicios. Hasta ahora quien más nos ha apoyado ha sido la Universidad, que nos ha prestado laboratorios y profesores. Lo único que nos falta son algunos materiales para finiquitar la construcción del automóvil", explicó el líder del equipo, compuesto por un conjunto multidisciplinar de estudiantes de carreras.
"Con este nuestro diseño, como equipo apostamos a la innovación y a la diferencia", reveló Camila Villanueva. "Los autos que existen son en realidad muy buenos, pero nosotros somos mejores", remató Fernanda Marambio.
