Motorola vuelve a apostar por el segmento de entrada con su nuevo teléfono

LONDRES.- El panorama de Motorola puede sonar confuso. Los resultados de la compañía durante el año pasado no fueron buenos, lo que explica la decisión de Google de venderla a Lenovo para dejar de percibir esas pérdidas. Pero aún así, la empresa presentó en 2013 el teléfono más vendido de su historia, el Moto G.

Los buenos resultados de la compañía en el segmento más económico (frente a la fría recepción en la gama alta con el equipo Moto X) motivaron el desarrollo del dispositivo presentado hoy: una apuesta más económica aún, bautizada como "Moto E".

El teléfono busca impulsar los precios del mercado hacia abajo, ofreciendo una buena construcción y especificaciones que permiten un funcionamiento correcto, con un precio de US$ 129, sin contrato.

En cuanto a especificaciones técnicas, Moto E cuenta con una pantalla de 4.3 pulgadas con resolución de 960x540 (con Gorilla Glass 3), un procesador dual core de 1.2 GHz, 1 GB de RAM, 4 GB de almacenamiento (ampliable vía microSD) y una cámara de 5 megapixeles. Pero, tal como lo hizo con los dos equipos anteriores de la línea Moto, la apuesta de Motorola va más allá de los detalles técnicos, ofreciendo una experiencia que apunta a ser duradera.

Esto significa que el equipo está capacitado para resistir salpicaduras de agua (no se ha aclarado si puede ser sumergido) y rayas en la pantalla, además de ofrecer una autonomía de batería suficiente para todo un día y garantizar al menos una actualización importante de Android (viene con Android 4.4.2; no está claro si llegará a 4.4.3 o a un lanzamiento más grande, como un posible 4.5).

La compañía también anunció una actualización de Moto G, sumando conectividad LTE y soporte para tarjetas microSD para ampliar su almacenamiento. La nueva versión de Moto G estará disponible por US$ 219.