Los últimos cómputos entregados por el Ministerio del Interior ratificaron ayer la tendencia general de los comicios municipales del domingo en orden a que la Concertación alcanzó un mayor porcentaje de la votación nacional, pero la oposición logró equiparar el número de alcaldías del oficialismo y consolidó una clara mayoría en la Región Metropolitana.
Los resultados emanados del Gobierno muestran además que la Alianza por Chile, con la conquista de treinta nuevas alcaldías, controla la mayor parte de los municipios en nueve de las trece regiones del país y su dominio local se extiende sin distinción desde las pequeñas comunas rurales hasta aquellas urbanas con alta densidad de población de sectores medios y populares.
Según analistas, este cambio en la composición del poder comunal a través del país tendrá una fuerte incidencia en las elecciones parlamentarias de fines del próximo año porque abre la posibilidad a la centroderecha de
igualar a la Concertación en fuerza legislativa e incluso duplicarla en algunos distritos.
A juicio del cientista político Gustavo Cuevas Farren los resultados de los comicios municipales del domingo testimonian el desgaste que ha sufrido la Concertación y el consiguiente fortalecimiento electoral que viene experimentando la derecha, que en su opinión se trata de una volatilización del voto DC que está capitalizando con mayor vigor la UDI dentro de la Alianza por Chile.
Opinión de Analistas Y Políticos
Resultados arrolladores como los obtenidos por Pedro Sabat en Ñuñoa y Joaquín Lavín en Santiago favorecen la posibilidad de doblar en esos distritos, sostiene el cientista de la UC Alfredo Rehren.
El fuerte avance opositor en la geografía comunal fue reconocido por políticos y analistas de la propia Concertación, quienes responsabilizaron del retroceso gubernamental a la indisciplina y la falta de unidad de los partidos para cumplir los laboriosos acuerdos convenidos para priorizar a determinados candidatos.
Desde el Palacio de la Moneda se reiteró ayer el discurso triunfalista que enfatiza la mayoría absoluta de sufragios conquistada por la coalición de gobierno y se atribuyó el crecimiento en el número de alcaldes de la oposición a la operatoria del sistema electoral y la división del oficialismo.
Los portavoces opositores, en tanto, señalaron que el evidente fortalecimiento del poder municipal de la centroderecha avala su expectativa de conquistar el próximo año la mitad del Parlamento y en el 2005 disputar en inmejorables condiciones la Presidencia de la República.
Ultimo Cómputo Reafirma Primeros Resultados
El Subsecretario del Interior, Jorge Burgos, dio a conocer en la mañana de ayer el último cómputo de las elecciones municipales del domingo correspondiente al 98,86 por ciento de los votos, informe que sólo hizo variar en algunas décimas los resultados difundidos con anterioridad.
De acuerdo a dicho informe los dos principales bloques políticos concentraron más del 92 por ciento de la votación nacional y volvieron a reducir a expresiones electorales de carácter marginal al resto de las agrupaciones partidistas como la izquierda comunista, la Unión de Centro Centro y los humanistas.
Agrupaciones Minoritarias
Los grupos menores no presentaron candidaturas en todas las comunas del país, situación que también limitó la posibilidad de mayores caudales de apoyo.
De las fuerzas alternativas sólo el PC logró elegir un alcalde en los comicios de anteayer en la comuna de San Fernando.
Los votos nulos fueron 386.418 votos (5,50 por ciento) y los blancos 180.020 (2,56 por ciento).
Al interior de los dos principales pactos se produjeron algunas modificaciones con respecto de la correlación previamente existente.
En la Concertación se confirmó una caída de la Democracia Cristiana de poco más de cuatro puntos, un levísima baja del PPD, un repunte marginal de los socialistas y un descenso de los radicales.
Además, todos los partidos oficialistas sufrieron una merma en su elenco de alcaldes, siendo mayor en el caso de la DC.
A su turno, la Alianza por Chile registró una significativa alza en su votación de siete puntos y medio con respecto de las anteriores municipales, los dos partidos aliados equipararon su fuerza electoral y en conjunto lograron una treintena de nuevas alcaldías, muchas de ellas de alta densidad poblacional e importancia política.
Nuevo Mapa Político De los Alcaldes
Más allá de las cantidades de votos y porcentajes en definitiva los comicios municipales del domingo pasado produjeron una sustantiva reconfiguración de la geografía política de las 341 comunas.
Aunque las dos coaliciones entregan cifras propias que no concuerdan entre sí, del informe electoral difundido por el Gobierno se desprende que la Concertación de Partidos por la Democracia tendría seguras a lo menos 166 alcaldías, cifra que representa un fuerte descenso respecto de las 201 logradas en las elecciones de hace cuatro años.
De dicha cifra se desglosan 87 alcaldes para la Democracia Cristiana, 34 para el PS, 30 para el Partido por la Democracia y 15 para el PRSD. Ello equivale a 28 comunas perdidas por la DC, 11 los socialistas, cinco el PPD y una los radicales.
En la Alianza por Chile la contabilización de jefes comunales es más compleja porque una gran proporción de ellos son independientes. De acuerdo al cómputo del Gobierno la coalición opositora habría elegido al menos 165 alcaldes, de los cuales 77 militan en RN, 47 en la UDI y unos 41 no registran filiación a los partidos.
Otros tres jefes comunales resultaron triunfadores en listas independientes ajenas a los pactos nacionales. Ello ocurrió en Concón, Alhué y Graneros.
El mapa político comunal muestra ahora que la Concertación quedó con una mayoría de alcaldías sólo en tres regiones del norte (Antofagasta, Atacama y Coquimbo) y la Región del Biobío, mientras que la oposición se quedó con la mayor parte de los futuros gobiernos comunales en las restantes nueve regiones, incluyendo la Quinta, Metropolitana, la Sexta y Séptima y las cuatro más australes.
Entre las comunas más importantes ganadas por el oficialismo se cuentan, entre otras, Iquique, Antofagasta, Calama, Copiapó, Coquimbo, Valparaíso, Viña del Mar, Chillán, Talcahuano, Temuco, Osorno, Puerto Montt, Punta Arenas, Cerro Navia, Pudahuel, La Pintana, La Reina, Macul, Quilicura y San Joaquín.
La coalición de centroderecha, por su parte, conquistó municipios claves como Arica, La Serena, San Felipe, Los Andes, Quilpué, Rancagua, Curicó, Talca, Linares, Concepción, Los Angeles, Valdivia, Coihaique, Santiago, Ñuñoa, Las Condes, Providencia, Vitacura, Lo Barnechea, La Florida, Peñalolén, Puente Alto, Cerrillos, Conchalí, Estación Central, Huechuraba, Independencia, La Cisterna, San Miguel, Maipú, Quinta Normal, Recoleta, Renca y San Bernardo, entre otras.
En la Región Metropolitana la Alianza por Chile pasará a controlar 30 comunas, mientras que la Concertación se quedará sólo con 21.
La UDI es la fuerza política que logró un claro predominio en esta región, ya que conquistó 17, seguida por 12 de Renovación Nacional, 11 de la Democracia Cristiana, 6 del Partido por la Democracia y 4 del Partido Socialista, a los que se suman un independiente de la alianza opositora y otro fuera de pacto.
En cuanto a los concejos comunales los cálculos preliminares le dan una mayoría a la Concertación con más de mil concejales y a la oposición alrededor de 700, mientras que los comunistas tendrían una veintena, al igual que la UCC. Tales proporciones se expresan también en la Región Metropolitana y se explican por el mayor número de candidatos que presentó el oficialismo, alrededor de quinientos más que la derecha.
