SANTIAGO.- Los senadores Gabriel Valdés (DC) y Ricardo Núñez (PS) explicaron este viernes los resultados de las gestiones que realizaron en Cuba, al descartar que el gobierno castrista haya entregado colaboración al grupo de subversivos chilenos fugados desde la CAS en 1996 y que fueron detenidos en Brasil en enero pasado por el secuestro del empresario publicista Washington Olivetto.
"No tenemos ninguna razón para dudar de lo que se nos ha dicho, tomando en cuenta que desde el plebiscito hacia adelante, Cuba no ha implementado ni respaldado ninguna acción de carácter violento en el país", declaró el senador Valdés, luego de sostener una reunión informativa con el vicepresidente de la República, José Miguel Insulza.
El parlamentario democratacristiano agregó que "tenemos la impresión de que (Cuba) puede cumplir un papel muy importante para erradicar los actos de violencia y terrorismo en América Latina. Ellos están concientes de que esa no es la vía para que los pueblos alcancen mejoramiento de sus condiciones de vida".
Al reafirmar la impresión de que Cuba no presta ayuda a estos grupos desde la vuelta a la democracia, el otro emisario del Gobierno que viajó a Cuba, el senador socialista Ricardo Núñez, aclaró que existía un mensaje escrito de Fidel Castro para Ricardo Lagos, donde se descarta, en forma tajante, la participación de cubanos en los actos terroristas vinculados al Frente Manuel Rodíguez (FMR) y el MIR.
"Lo que nosotros queríamos saber, lo supimos. Los frentistas no están siendo rearticulados por ellos (los cubanos)", dijo Núñez, y agregó que "(Fidel Castro) nos ha asegurado que las personas con los nombres de los exhortos no ingresaron a Cuba y que cuando tuvieron conciencia de la existencia de grupos similares, fueron expulsados".
Tras la referida información, ambos parlamentarios respondieron a las críticas surgidas a raíz de su viaje a Cuba, al decir que "algunos personajes dijeron que era estéril, desde Cachagua, otros que éramos inocentes. Uno que quiere ser senador, que debe entender que entre senadores nos respetamos, dijo que íbamos a pedir limosna. Hemos hecho un trabajo serio y sigiloso al servicio de Chile para evitar que tenga flancos responsables o que ayuden a la violencia en Latinoamérica".
Paralelamente, el ministro del Interior, José Miguel Insulza, destacó el viaje efectuado por los senadores concertacionista a Cuba al decir que "ciertamente fue un aporte muy importante. Creo que realmente ha sido una misión muy positiva".
Las versiones sobre la presunta protección de Castro a los cuatro terroristas de izquierda fugados en 1996 resurgieron cuando uno de ellos, Mauricio Hernández, fue detenido el 3 de febrero en Sao Paulo por participar, junto a otros dos izquierdistas chilenos, en el secuestro de Olivetto, por quien pidieron 10 millones de dólares de rescate.
La reaparición de Hernández en Brasil hizo temer un reagrupamiento del FMR en Chile, pero la tesis fue descartada por el Presidente Lagos, quien reconoció estar insatisfecho por la escasa colaboración del gobierno cubano a las inquietudes chilenas sobre la estadía y protección de los fugados en la isla.
En una carta a la autoridades chilenas, difundida esta semana, Castro dijo que su gobierno cortó el apoyo a los guerrilleros chilenos tras el retorno de la democracia, en 1990, y pidió que "cesen las calumnias y presiones a Cuba".
