La relación entre técnico y jugador se fue deteriorando por el estilo de vida que comenzó a llevar Becky con su esposa, llena de lujos y rodeados de celebridades. Las desavenencias entre los dos se hizo evidente cuando el futbolista debió recibir algunos puntos de sutura en su ceja derecha, luego de haber discutido con Ferguson en los camarines de un estadio, donde sir Alex le habría lanzado una zapatilla de fútbol a la cara.
No fue extraño que el mediocampista decidiera emigrar a España, donde jugó hasta el 2007 por el Real Madrid. Siendo parte de los galácticos logró varias victorias para su carrera. Pero su vida privada se vio afectada cuando los rumores de varias infidelidades a su esposa Victoria se hacían cada vez más frecuentes. A pesar de todo, el matrimonio salió adelante y la pareja, hasta hoy, no deja de aprovechar cualquier oportunidad que tiene para demostrar su cariño en público.
Fue durante esta época, en 2003, que Becky recibió de manos de la reina Isabel II, la condecoración de la Orden del Imperio Británico en el palacio de Buckingham, no de Beckingham. Ahí se vio a Victoria, luciendo un inolvidable sombrero de plumas negras, orgullosa del reconocimiento hecho a su marido.
Ya sea porque es talentoso, porque es realmente guapo, porque es embajador de la UNICEF y posee una academia de fútbol para darle más oportunidades de jugar ese deporte a los niños, porque gana cifras estratosféricas de dinero y no sólo viste con las mejores marcas, sino que inspira nuevas colecciones de ropa… David es uno de los hombres más deseados en el mundo.
Es por eso que incluso ha inspirado películas, como la inglesa “Bend it like Beckham” (traducida como “Quiero ser como Beckham”), que narra la historia de una joven de origen hindú, que sueña con ser como el futbolista e ingresar a su propio equipo, pero debe superar los prejuicios de su tradicional familia.
 |
 |
