A diferencia de Sean Lennon –el hijo que John Lennon tuvo con Yoko Ono y que monopolizó el afecto paterno–, Julian Lennon, fruto del primer matrimonio del Beatle con Cynthia Powell, vivió siempre con la carga de haber sido ignorado por su progenitor. La relación de Julian con su madre, en cambio, siempre ha sido próxima, al punto que es su hijo quien escribe el prólogo del reciente libro de Cynthia, John (2005). Acerca del padre, Julian es más escueto. Como es tradicional, se ha negado a hablar públicamente sobre el tema en el nuevo aniversario de la muerte de John Lennon. Sólo consta la declaración que ha puesto en su sitio oficial, como todo manifiesto público.
"Papá fue un gran talento, y su música e ideales son inspiración para millones. De todos modos siempre he tenido emociones muy encontradas acerca de papá. Él fue el padre que amé, y que me abandonó de tantas maneras. Quién sabe cómo se habría desarrollado nuestra relación si no hubiera sido asesinado… es triste pensar que su temprana muerte nos robó la posibilidad de conocernos mejor el uno al otro. Lo que no se puede obviar son sus letras y música, ése es su legado para mí. Para empezar está en mi sangre. Como papá yo me hice músico también, y al igual que a muchos otros artistas en este mundo su música y su poesía continúa siendo una influencia para mí, hoy y probablemente cada vez más".
