El comienzo del desfile de las distintas delegaciones está previsto para las 19 horas y en el acto, cuyos pormenores permanecen en estricto secreto, contará con la presencia del presidente dominicano, Hipólito Mejía, y del alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, quien esta mañana se reunió con los delegados de Odepa.

A su llegada a Santo Domingo, el tenista chileno sostuvo que los Panamericanos son su oportunidad para ganar la medalla que no pudo conseguir en los Juegos Olímpicos.

"Nueva York es una buena ciudad para el deporte, es una ciudad de soñadores y para todo el mundo, eso es lo que es el deporte competitivo de verdad", dijo el alcalde Michael Bloomberg en una reunión con los miembros de Odepa.

La chilena Érika Olivera, que participará de la maratón el 9 de agosto, verá adelantada su salida en media hora.

La participación del famoso beisbolista Sammy Sosa, quien de un "batazo" encenderá la llama, es uno de los rumores para la ceremonia de este viernes.

El belga Jacques Rogge estará presente en la ceremonia del viernes, en una apretada agenda que incluye una entrevista con el presidente dominicano, Hipólito Mejía, en el Palacio Nacional, sede del gobierno.

El campeón centroamericano estilo mariposa, Juan José Velez, fue suspendido por cuatro años, al encontrársele nadrolona en los exámenes de orina posteriores a los Juegos Universitarios de Beijing (2001).

El lanzador de la bala chileno señala que la competencia en Santo Domingo será muy fuerte por la presencia de los lanzadores estadounidenses y canadienses.

A los deportistas se sumarán 55 técnicos, once médicos, 19 delegados de federaciones, seis miembros del Comité Olímpíco de Chile (COCh) y trece jueces, para una delegación total de 298 personas.

La delegación chilena está presente con nueve tiradores en la Copa Villa de La Habana de esgrima, que se disputa en los salones "Pabexpo", al oeste de la capital, con la asistencia de más de 600 tiradores de 45 países.

La CBF desistió de su anuncio anterior y decidió enviar a la selección Sub 20 a Santo Domingo.

La decisión fue tomada por la Confederación Brasileña de Fútbol "para no desgastar a los clubes" que tienen en sus planteles jugadores seleccionados Sub 20.