Un ejemplar único del Ferrari 250 GT SWB California Spider de 1961 se convirtió en la estrella de la subasta organizada por Gooding & Christie’s, alcanzando la cifra récord de 25 millones de dólares.
Se trata de uno de los dos únicos ejemplares fabricados con especificaciones de competición, combinando elegancia y prestaciones históricas.
Carrozado por Scaglietti en aleación ligera con techo rígido desmontable, el auto de Maranello está equipado con un motor V12 de aproximadamente 280 CV derivado del 250 Testa Rossa, además de detalles exclusivos como una tapa de combustible de apertura rápida y sistema de escape deportivo.
Originalmente, el auto fue entregado en Alemania a Ernst Lautenschlager donde el auto participó en carreras locales y de subidas, acumulando varias victorias.
A lo largo de las décadas, el Ferrari pasó por colecciones privadas en Europa y Estados Unidos hasta recibir, en la década de 2000, una restauración completa que recuperó su refinado color gris ahumado.
Conservado en un estado excepcional, certificado por Ferrari Classiche y acompañado de documentación completa, este 250 GT SWB California Spider se consolida como una de las joyas históricas del Cavallino Rampante y un claro referente del Gran Turismo de los años 60.