SANTIAGO.- Cada vez será más habitual ver en las canchas del fútbol joven de Chile a jugadores inmigrantes. Ya sea haitianos, brasileños, venezolanos, peruanos, uruguayos, etc.
Esto va de la mano con la nueva regla impuesta por la ANFP que determina que ahora cada club podrá tener hasta un máximo 10 extranjeros en sus series menores, que se deben repartir entre las Sub 15, 16, 17 y 19. El cupo máximo de foráneos por serie subió de dos a cuatro.
Luis Alberto Ramírez, gerente del Fútbol Joven de la ANFP, aclara a El Mercurio que "todos estos jugadores, finalmente, van a pasar a ser chilenos. Es la realidad que vive el país, y tiene un sentido social para la integración de los niños".
Agrega que "las regulaciones las pone la FIFA. Se debe poner cuidado con el tráfico de menores y eso quiere decir que sus padres deben vivir en el país, con domicilio y empleo comprobable. Chile tiene un caso independiente al del resto de Sudamérica. Según lo que hemos investigado, tenemos el universo más numeroso de los países de la Conmebol".
Dentro de los clubes que llevan la delantera está Unión Española. La institución está enclavada en una comuna con un alto número de foráneos, como es Independencia.
"Hay bastante interés de peruanos, paraguayos, haitianos, brasileños y venezolanos, pero los que quedan, generalmente son argentinos y colombianos. Les abrimos las puertas a los inmigrantes, tal como fueron los españoles, alguna vez, en el país. Todos llegan por diferentes medios y argumentos, como los más pequeños, que son vecinos al estadio Santa Laura y a los campos de entrenamiento de Lampa", cuenta al citado medio Andrés Fabry, coordinador general de las inferiores de la institución, que recibió a unos 1.500 niños a prueba.
Y también en el norte. Algo similar sucede en Arica y Antofagasta. Rubén Canales es el director del Fútbol Joven de los ariqueños, club que tiene a unos 500 niños en cada prueba, de los cuales cerca de un 10% son extranjeros: "Han venido menores de Colombia, que son los que más llegan, además de Ecuador, Perú y Bolivia. Es bueno que esto se extienda, porque, de paso, apura a los chilenos".
Un caso emblemático es el del cafetalero Einer Camilo Hurtado, que pronto se sumará al primer equipo. "Se viene dando desde hace unos cinco años. Es un fenómeno que hemos notado, lo que se acrecienta también con nuestros viajes a Tacna", añade.
En tanto, Víctor Oyarzún, gerente técnico de los "Pumas", menciona que "tenemos hartos muchachos colombianos, pero se nos ha complicado el poder incorporarlos. Sí subimos a un argentino al primer equipo (Germán Estigarribia), por ejemplo. Acá hay una población importante de extranjeros, lo que también se nota en los equipos con los que nos enfrentamos", cierra.
