SANTIAGO.- "Es uno de los ciclistas más completos y más regulares" de todos los que habían pasado por la Vuelta de Chile. Eso decían los diarios de la época del francés Christophe Moreau, quien triunfó a su antojo en la edición 1996 del giro criollo, sólo a dos años de haber ingresado al profesionalismo.
Y el galo lo recontraconfirmó años después en el concierto mundial: terminó cuatro veces en el "top ten" del Tour de Francia, incluso fue cuarto en la edición de 2000; ganó dos veces la Criterium Dauphine Liberé y fue campeón de Francia en ruta en 2007.
Hoy Moreau es representante comercial de una empresa audiovisual y recordó en una conversación con Emol su victoria en la Vuelta de Chile de hace 21 años, algo que nunca estuvo en su cabeza porque ni siquiera estaba en sus planes correrla.
1°Un minuto y 39 segundos fue la diferencia entre Moreau y Pascal Hervé, ambos del equipo Relojes Festina y que fueron campeón y subcampeón de la Vuelta en 1996
El francés dice tener "
un gran recuerdo de mi victoria en Chile, pese a que no quería ir. En la misma fecha (marzo) se corría la París-Niza, pero mi director deportivo no me dejó opción, así que tuve que prepararme y mi compañero Pascal Hervé, más experimentado que yo, me dijo 'no te preocupes, yo te cuidaré y harás un buen recorrido por Chile. Al final, fui muy motivado a correr allá".
Moreau ganó sin contrapeso la carrera. Basta con decir que por escasas 59 centésimas de segundo (mucho menos de lo que se demora un pestañeo) no fue líder a partir del prólogo. Se vistió con la tricota roja de puntero en Rancagua y la mantuvo durante diez días, hasta llegar a la meta final en Santiago.
"La prueba fue muy dura, por las características del recorrido y por la presión que nos pusieron los otros equipos. No hay que creer que todo fue tan fácil para nosotros. Tuvimos que esforzarnos mucho para ganar, así que esta victoria es magnífica"
Christophe Moreau, en 1996
"Después del súper entrenador que tuve, fui motivado a Chile. Estaba en buenas condiciones y me propuse luchar dignamente", rememora el ciclista que hoy tiene 46 añois. Y continúa: "Finalmente gané la Vuelta,
pero me entristeció dejar a un amigo chileno que hice durante la carrera. Al dejar el país, dejé muchos momentos lindos".
Si bien con 24 años Moreau prometía ser una figura del ciclismo mundial, la Vuelta de Chile lo marcó, y en cierta forma fue un espaldarazo para lo que vendría después.
"Sin duda que mis mejores resultados y recuerdos están en el Tour de Francia (participó en 15 ediciones). Quizás el más hermoso es el día que gané el prólogo en el TDF de 2001 porque me vestí de amarillo (la tradicional tricota que usa el líder de la prueba) y porque superé a Lance Armstrong... Yo no era necesariamente el favorito en el inicio de la carrera y fue una gran sorpresa para mí, una gran sensación", cuenta Moreau.
Para el ciclismo de hoy y los jóvenes que sueñas en hacer algo como él, el francés también tiene palabras.
"Uno debe creer en sus sueños, más ahora que el ciclismo se ha vuelto muy internacional. Hay muchos más países que hace 20 ó 30 años que producen ciclistas competitivos... La presencia de eritreos, kazajos, africanos y cada vez más de sudamericanos hacen del ciclismo un fuerte factor internacional. También hay gran visibilidad para los patrocinadores y la TV lleva el deporte a todo el mundo", dice haciendo un llamado a todos aquellos que sueñan con llegar al primer nivel de este deporte.
- ¿Y qué opinión tienes de Chris Froome (ganador del Tour de Francia) y del colombiano Nairo Quintana?
"Ambos demuestran que ciclismo no sólo existe en Europa. La bicicleta ha evolucionado, también el seguimiento a los corredores y todo se conoce a través de los medios y las redes sociales. Específicamente, Froome está llegando al final de su carrera y buscará hacer más historia ganando su quinto Tour de Francia. Quintana, a pesar de su corta edad, ya cumplió grande actuaciones y en mi opinión, será el digno sucesor del keniata en las grandes carrera (Giro, Tour y Vuelta)".