Novak Djokovic, número uno del mundo, vivió hace dos años el momento más duro de su carrera. Tras caer con Benoit Paire en segunda ronda del Masters de Miami quiso retirarse. Su esposa dio detalles sobre ese oscuro episodio.
"Me dijo que quería retirarse. Perdió en Miami, una derrota terrible, nos reunió a todos y nos dijo: 'He terminado’. Y yo le dije, '¿cómo?'. 'Quiero que hablen con mis sponsors y les sean muy claros. No sé si voy a parar seis meses, un año o para siempre. Díganles que si quieren estar junto a mí, perfecto, pero si no quieren estar, estaré feliz, quiero ser claro con todo el mundo'. Mi intención fue decirle que no podía retirarse. Nos pusimos a llorar, le dije que no era el momento de retirarse", contó Jelena Ristic en entrevista con Graham Bensinger.
"Nole" no lograba superar la caída en los Olímpicos de Río ante Juan Martín del Potro y luego tuvo que lidiar con una compleja lesión. Ya estaba harto, pero las vacaciones lo ayudaron a repensar su decisión.
Un día, vio a Jelena jugando sola. Él siempre entendió el tenis como una competencia en la que solo vale ganar, pero en ese momento se dio cuenta que también podía divertirse.
"Estaba descalzo, sin camiseta y dijo '¿puedo tomar esa raqueta?', y le dije 'no, tú quieres retirarte, tu ya no juegas'. Entonces, él comenzó a hacer algunos saques y se reencontró. El último día de las vacaciones ya era otro, se puso las zapatillas, la camiseta y me dijo: 'Voy a llamar a Marián (Vajda) y le voy a pedir que sea de nuevo mi entrenador'", expresó.
El balcánico regresó y ha mostrado un nivel avasallador sobre la pista. La fortaleza mental ha sido la clave. "Novak no es un buen perdedor, no le gusta nada perder, pero cuando cae al pozo, al fondo de todo, es cuando toca ese fondo y construye de nuevo una nueva torre. Y siempre una torre espectacular", comentó Ristic.
