Una nueva velada de la UFC en Las Vegas dejó interesantes peleas, entre las que se destacaron dos fulminantes nocauts.
Primero fue la de
Tanner Boser. Impactante. El canadiense protagonizó el combate más violento:
Con ocho puñetazos furiosos a la cabeza del brasileño Philipe Lins se llevó la lucha. Lo mandó a dormir en el primer asalto.
Así, Boser, apodado "The Bulldozer", consiguió su segundo triunfo en la UFC, mientras que el sudamericano acumuló su segunda derrota consecutiva.
También fue similar a lo que hizo el japonés Takashi Sato. Menos de un minuto (45s) le bastó para noquear a Jason Witt en el round inicial. Una lluvia de golpes liquidó a su rival, quien decidió aceptar subirse al octágono a última hora. Una decisión que le costó caro.
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