Con Claudio Bravo de titular y jugando todo el partido, el Betis superó en El Alcoraz al colista Huesca por 2-0.
Manuel Pellegrini respira un poco más tranquilo. Con la victoria pone tierra de por medio con la parte baja de la tabla. El elenco bético quedó décimo con 23 puntos.
La primera parte estuvo igualada, con una gran presión de ambos conjuntos sobre la salida del balón rival y mayor posesión local en los inicios pero que se fue decantado para el lado verdiblanco conforme transcurrieron los minutos.
El equipo azulgrana apenas inquietó a Claudio Bravo en el primer tiempo y solo realizó un remate entre los tres palos, ya en tiempo de prolongación, mientras que el Betis, cargando el juego por su costado izquierdo con combinaciones entre Sergio Canales, Aitor Ruibal y Loren Morón, se aproximó más al área contraria pero tampoco llevó gran peligro.
De hecho, la mejor ocasión fue un remate de Loren en el minuto 23, tras una pérdida de Pedro López, que fue abortado por el griego Dimitrios Siovas lanzándose al suelo.
Tras el tiempo de descanso, la situación no cambió demasiado, con el equipo de Manuel Pellegrini con una ligera superioridad en la posesión pero desarrollándose el juego mayoritariamente en el centro del terreno.
En el minuto 78, después de un córner, un preciso centro de Emerson Leite desde la derecha fue rematado por Aissa Mandi para poner el 0-1.
Tuvo el empate el Huesca, pero se encontró con Bravo. Tremenda reacción del meta chileno tras un remate del japonés Shinji Okazaki.
El Betis acabó cerrando el partido en el tiempo añadido con otro centro medido, en este caso de Nabil Fekir para el paraguayo Antonio Sanabria, que cabeceó en boca de gol para poner el 0-2.