Todo comenzó el pasado miércoles 6 de abril. En el programa de deportes de radio ADN revelaban un audio en el que el juez
Francisco Gilabert -según sus propias palabras- reconocía haber sido inducido a cobrar penal en favor de Huachipato en el duelo por la Promoción entre los acereros y Copiapó, jugado el 26 de enero.
El juez de ese duelo le contaba una serie de hechos a otro interlocutor, que hoy resulta ser clave, tras la investigación de la ANFP, que arrojó que todo lo que se dijo en esos audios habían sido
una maquinación para desestabilizar al arbitraje chileno y a quien en ese momento era el jefe de los jueces, el argentino Javier Castrilli.Pero
¿Quién es la persona que recibió los audios de Gilabert y que según las diligencias habría sido clave en la filtración de ellos?
"El primero de todos que está con problemas graves, y
voy a liberar el nombre, es Felipe Jerez, un guardalínea de Primera B, el que recibió los audios de Gilabert. Quiero aclarar que Gilabert nunca quiso ni tuvo la intención (de divulgarlos), él mandó los audios de algo que interpretó en el momento", explicó ayer en radio ADN, el periodista Juan Cristóbal Guarello, que fue quien reveló los polémicos audios aquel 6 de abril.
Pero ¿
Quién es Felipe Jerez? Como apunta Guarello es juez de línea, pero hay un dato muy relevante.
Era uno de los 14 árbitros que Javier Castrilli había despedido, cuando era jefe de los jueces nacionales.Jerez fue citado también a declarar durante la investigación de la ANFP y habría entregado datos clave que terminaron con la determinación final en Quilín.
El juez de línea tuvo que entregar sus argumentos como también lo hicieron aparte de Jerez y Gilabert,
Cristián Droguett (jefe del VAR en el citado duelo) y Mario Vargas (Quality Manager del encuentro).
Cabe recordar que ayer lunes el Oficial de Cumplimiento de la ANFP, Miguel Ángel Valdés, entregó las conclusiones de un informe, sobre la investigación de lo ocurrido en el polémico duelo Huachipato-Copiapó, que
incluyeron las pesquisas del audio del juez Francisco Gilabert y diversos testimonios de los involucrados.En el escrito se concluyó que todo se trató de
una operación para desprestigiar el cuerpo arbitral, que en ese momento tenía como jefe al argentino Javier Castrilli, quien fue desvinculado entremedio de la polémica.
El documento que difundió el ente rector del fútbol nacional indica que "no existe ni ha existido intervención o presión indebida, abuso de autoridad ni injerencia alguna por parte de terceros, respecto a la decisión adoptada por el arbitro, el Sr. Gilabert en el cobro del penal en el minuto 69, del partido del partido de promoción disputado entre Huachipato y Deportes Copiapó, el día 26 de enero de 2022".
En esa línea, indican: "Descartándose, con los antecedentes recabados en el curso de la investigación, cualquier tipo de comunicación desde Santiago con los árbitros presentes ese día en el encuentro".
Además sentenció que "se lograron recopilar antecedentes y datos que evidencian la existencia de actos destinados a desacreditar y difundir información distorsionada para desestabilizar el arbitraje chileno, que dañaron a la Asociación Nacional de Fútbol Profesional y la transparencia de la actividad del fútbol en su conjunto".
