Escándalo en el fútbol mexicano. En el duelo entre el León y el América, el árbitro Fernando Hernández le dio un rodillazo a un jugador.
El marcador estaba 1-0 en favor del conjunto esmeralda, pero el chileno Diego Valdés lo empató para las "Águilas". Los jugadores del León se fueron encima del juez reclamando por una mano y uno de los más efusivos fue Lucas Romero.
El argentino se puso cara a cara con Hernández y el árbitro lo apartó con un rodillazo. Romero cayó fulminado.
Tras el encuentro, el mediocampista habló de lo ocurrido. "Obviamente son seres humanos muchas veces se pueden equivocar y esas equivocaciones terminan desarrollando eso que pasó, muchos malos entendidos. Me dijo que fue sin querer", expresó.
A Romero se le consultó si el árbitro debe ser sancionado. "No pido nada, simplemente que ellos también nos respeten como nosotros los respetamos en la cancha porque son la autoridad", respondió.
El parido tuvo un final caliente. Con varios cruces. Finalmente, el León -donde milita Víctor Dávila- y el América empataron a dos.
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