Hugo Catrileo obtuvo un enorme triunfo el pasado domingo. El maratonista chileno se quedó con la medalla de plata en los Juegos Panamericanos de Santiago 2023.
Han sido días muy agitados para el deportista de 26 años. Este jueves volvió a su tierra de origen: Puerto Saavedra, en la región de La Araucanía. Vivió un emotivo momento. La gente salió a recibirlo a las calles y darle cariño. Se convirtió en un símbolo.
"Se reunió mucha gente, mucho niño, personas adultas mayores. Ha sido muy bonito el recibimiento que hemos tenido yo, mi entrenador, mis padres. Estamos muy agradecidos. Nos subimos a una camioneta y en la parte de atrás íbamos con las banderas, recibiendo el reconocimiento de la bandera mapuche y la bandera del país que se elevó en alto el fin de semana. Estuvimos ahí recorriendo, pasando por lugares del centro de Puerto Saavedra. Fue una caravana", expresó hoy en conversación con Agenda Deportes Emol TV.
"Había muchísima gente. Fue una sorpresa totalmente para mí, mucha gente saliendo a las calles, mucha gente agradeciendo por dejar el nombre de la comuna en el mapa , muy felices, mucha gente emocionada", añadió.
Catrileo es hincha confeso de Colo Colo. Antes de viajar a Puerto Saavedra, en un evento de Adidas, pudo conocer a un hombre que admira: Esteban Paredes.
El atleta le pidió una foto al goleador histórico del fútbol chileno y la subió a redes sociales. Se viralizó rápidamente.
"Llegó Esteban Paredes, lo fui a saludar, fue muy amable, muy gentil. Él estaba al tanto del resultado del maratón. También estaba (Diego) Rivarola de la Universidad de Chile, pero con él no me saqué la foto jaja", afirmó.
Colo Colo reaccionó al ver la foto de Catrileo y le dejó un mensaje: "Hugo, estás invitado para acompañarnos en algún partido o entrenamiento, ¡te esperamos en la Ruca!".
El maratonista afirmó que aceptará la invitación, aunque aún no sabe cuándo.
"No sé cómo funciona para poder gestionarlo, pero la voy a tomar cuando esté por Santiago, para vivir ese sueño de todo niño. Saber qué hacen, ver cómo es la vida de un deportista profesional en este deporte que es bien popular", manifestó.
Su historia de vida
Catrileo hoy trabaja con marcas como Gatorade o Adidas. Pero su camino en el atletismo no ha sido sencillo. Debió lidiar en su momento con la falta de apoyo.
Durante la entrevista, habló de "héroes anónimos", gente que lo ayudó cuando aún no se labraba un nombre en el alto rendimiento.
"Son personas que están en la base para ser deportista. Si no hubiesen estado esas personas, yo hoy no estaría dando esta entrevista. Con esas personas seguimos en contacto", comentó.
También mencionó a sus tíos: "Cuando llegué a Temuco, pasé a ver a unos tíos que me regalaron mis primeras zapatillas, mis primeros buzos. Cosas mínimas que en un inicio valen mucho".
A Catrileo no le daba para vivir del deporte. Trabajó para una empresa forestal y después como vendedor de una compañía que ofrece servicios de televisión, telefonía e internet.
Meses antes de los Panamericanos, fue despedido. Pero no guarda rencor. Cree que fue justo, ya que había bajado su rendimiento laboral.
"Estoy agradecido (por ese trabajo). Mi nivel deportivo fue aumentando, necesitaba mas tiempo. Es difícil decir estoy entrenando, tenme paciencia, porque no hay una cultura nacional deportiva. Si un deportista está entrenando más, quizá siga rindiendo en el trabajo, pero le va a costar más. Esperemos que haya un cambio", declaró.
Siguiendo en esa línea, expuso por qué le era tan difícil mantenerse ahí y compatibilizarlo con su vida de atleta.
"Vendía puerta a puerta. Trabajaba en Temuco y cuando salíamos a las comunas a vender yo llegaba cansado. Mis piernas se terminaban atrofiando y llegar a entrenar así era complicado. Con el tiempo empecé a decir que no, que prefería trabajar en Temuco. Cuando no salía, eran menos probabilidades de vender, bajaban los números en el trabajo", aseveró.
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