Se terminó el Mundial de balonmano para las "Lobas". Las chilenas terminaron en un meritorio lugar 27 entre 32 selecciones.
Las nacionales vencieron de forma dramática 26-25 a China para finalizar en ese lugar y la gran figura de las dirigidas por Felipe Barrientos fue la arquera Madeleine Cortez.
La portera de 23 años se consolidó con creces en el Mundial. Ante las asiáticas, por ejemplo, tuvo una gran tapada sobre el final para evitar lo que hiubiera sido el empate.
Pero más allá de eso, Cortez logró un histórico récord para el balonmano nacional femenino:
Fue escogida cuatro veces jugadora del partido en siete duelos.
Su primer premio fue ante Serbia, pese a la derrota 30-16, en el último cotejo de fase de grupos. En ese encuentro, además, anotó dos goles.
Pero después sumó tres galardones más: En las victorias frente a Irán (30-20) y Kazajistán (27-23) y en la derrota contra el Congo (24-21).
Las tremendas actuaciones de la oriunda de Chépica le valieron bastantes elogios en el Mundial. Así lo cuenta Juan Pablo Montes, presidente del balonmano chileno y que acompañó a las "Lobas" en el Mundial.
"Capítulo aparte lo que ocurrió con Madeleine. Muchos elogios. Se ha señalado que es una de las mejores porteras del torneo, incluso. Con porcentajes de atajadas por sobre (arqueras de) equipos con mucha historia en el balonmano, Dinamarca, Noruega y otros países. Eso se destacó en el partido con Serbia, un país con mucha tradición y ella salió elegida la mejor. Lograrlo cuatro veces al hilo... Nunca ningún jugador de Chile lo logró. Nunca cuatro veces al hilo y ante equipos europeos. Eso es muy bueno", dice a Emol.
Los elogios no fueron solo para Cortez, sino también para todo el equipo: "Se habló mucho del juego, es lo que alaban. Dinámico, ágil, un juego bastante moderno y que ha sido un muy buen retorno de Chile en el balonmano femenino. En el 2009 se ganó un solo partido y ahora fueron tres".
Un Mundial histórico
Para las "Lobas" fue un gran campeonato. Es la segunda vez que Chile tiene representación femenina en una Copa del Mundo.
La primera vez fue en 2009, cuando las nacionales quedaron 23 de 24 equipos (era otro formato) y lograron apenas un triunfo en nueve partidos, con un porcentaje muy bajo de rendimiento.
Ahora, las nacionales quedaron 27 de 32 y consiguieron tres victorias y cuatro derrotas en siete encuentros. Números considerablemente mejores.
Las otras selecciones sudamericanas de la cita planetaria fueron Brasil (9°), Argentina (20°) y Paraguay (29°).
