El croata Luka Modric, capitán del Real Madrid, no continuará en el conjunto blanco después del Mundial de Clubes, según anunció este jueves. Este sábado frente a la Real Sociedad será su último partido en el Santiago Bernabéu.
"Ha llegado el momento.
El momento que nunca quise que llegara, pero así es el fútbol, y en la vida todo tiene un principio y un final... El sábado jugaré mi último partido en el Santiago Bernabéu", escribió el mediocampista de 39 años en sus redes sociales.
"Llegué en 2012 con la ilusión de vestir la camiseta del mejor equipo del mundo y con la ambición de hacer cosas grandes, pero no me podía imaginar lo que vino después. Jugar en el Real Madrid me cambió la vida como futbolista y como persona. Me siento orgulloso de haber formado parte de una de las épocas más exitosas del mejor club de la historia", continuó.
Modric, que llegó al Real Madrid en 2012 procedente del Tottenham, dejará el club como el futbolista con más títulos en su historia, con 28 en su palmarés: 6 Ligas de Campeones, 6 Mundiales de Clubes, 5 Supercopas de Europa, 4 Ligas, 2 Copas del Rey y 5 Supercopas de España.
Además, en 2018 fue galardonado con el mayor premio individual, el Balón de Oro.
Se trata de otra salida que remece al Madrid, tras la ya confirmada partida de Carlo Ancelotti.
Revisa la carta completa de Modric
Queridos madridistas:
Ha llegado el momento. El momento que nunca quise que llegara, pero así es el fútbol, y en la vida todo tiene un principio y un final... El sábado jugaré mi último partido en el Santiago Bernabéu.
Llegué en 2012 con la ilusión de vestir la camiseta del mejor equipo del mundo y con la ambición de hacer cosas grandes, pero no me podía imaginar lo que vino después.
Jugar en el Real Madrid me cambió la vida como futbolista y como persona. Me siento orgulloso de haber formado parte de una de las épocas más exitosas del mejor club de la historia.
Quiero dar las gracias de corazón al club, especialmente al presidente Florentino Pérez, a mis compañeros, entrenadores y a toda la gente que me ha ayudado durante todo este tiempo.
A lo largo de estos años he vivido momentos increíbles, remontadas que parecían imposibles, finales, celebraciones y noches mágicas en el Bernabéu... Lo hemos ganado todo y he sido muy feliz. Muy, muy feliz.
Pero más allá de los títulos y las victorias, me llevo en el corazón el cariño de todos los madridistas. De verdad que no sé cómo explicar la conexión tan especial que tengo con vosotros y lo apoyado, respetado y querido que me he sentido y me siento. Nunca olvidaré cada ovación y todos los gestos de cariño que han tenido hacia mí.
Me voy con el corazón lleno. Lleno de orgullo, de gratitud y de recuerdos imborrables. Y aunque, tras el Mundial de Clubes, ya no vaya a vestir más esta camiseta sobre el césped, yo siempre seré madridista.
Nos volveremos a ver. El Real Madrid siempre será mi casa. Para toda la vida.
Hala Madrid y Nada Más.