Independiente de Felipe Loyola, Luciano Cabral y Pablo Galdames vive un gran momento. El lunes pasado eliminaron a Boca en cuartos de final del torneo argentino y mañana se enfrentarán a Huracán (17:30) por un lugar en el partido por el título.
Por si fuera poco, en la Copa Sudamericana están líderes de su grupo a falta de una fecha y por su presente, se erigen como candidatos al trofeo.
Esta tremenda actualidad del "Rojo" se debe, en parte importante, a los dos últimos mercados de pases que hizo el club, según analizan en Argentina.
La Nación (LN), de hecho, lanzó un artículo en el que hablan de la
"fórmula" con la que el equipo de Avellaneda fichó a los "desconocidos" Loyola, Cabral, Galdames y otros jugadores que hoy son claves para el DT Julio Vaccari.
"¿De dónde salieron? Independiente y la fórmula del éxito: cómo fue el proceso de búsqueda para refuerzos que sorprenden a todos", tituló el medio.
"Kevin Lomónaco, Felipe Loyola, Santiago Montiel y Federico Vera en el invierno pasado; Luciano Cabral, Álvaro Angulo, Sebastián Valdez y dos suplentes con garantías como Rodrigo Fernández Cedrés y Pablo Galdames en el verano. Jugadores que llegaron en condiciones accesibles para las arcas de Independiente y que vienen cumpliendo con el sueño de cualquier dirigente: rendir muy bien en la cancha y revalorizarse en la tabla de cotizaciones del fútbol internacional. Los dos últimos mercados de pases explican en buena medida el cambio de humor que vive el club de Avellaneda", expone LN.
El medio argentino cuenta que el tema refuerzos había sido "traumático" en tiempos recientes. El club sufría por inhibiciones, distintas deudas y problemas económicos justamente por fichajes que resultaron fuertes fracasos.
"'Armar un proyecto integral para el club es lo único que va a posicionar otra vez donde se merece a un club tan pero tan grande como Independiente', fue desde el principio la idea y el lema de Alejandro Tocalli, actual director deportivo de la institución. Preparador físico con estudios en gestión deportiva y una larga experiencia en entidades del país y el extranjero (Chile, China y Bahréin), el hijo de Hugo, que también trabaja en el Rojo como coordinador de las divisiones inferiores, comenzó su tarea en julio de 2024, prácticamente al mismo tiempo que Julio Vaccari firmaba su contrato como director técnico, y la conjunción laboral entre ambos resultó ser el brebaje mágico que tanto necesitaba el Rey de Copas para empezar a escapar de la medianía", analiza La Nación.
¿Cuál es la fórmula del éxito entonces? "Conseguimos formar un equipo de trabajo con tres patas muy fuertes:
cuerpo técnico, dirigentes y secretaría técnica. Nos reunimos y hablamos de manera permanente e intercambiamos mucha información. Nosotros seguimos a un más de cien jugadores, Julio (Vaccari) y sus asistentes de análisis nos acercan nombres, cada tanto algún directivo también aporta en ese sentido. El mérito de que las cosas estén yendo bien es de todos", decía Tocalli a fines de 2024 a un medio partidario.
Incluso, en ese momento hablan de Cabral. El mérito por su fichaje se lo otorgan a Daniel Seoane, secretario general de club.
"Él lo había visto en un Racing-Coquimbo y le había encantado. Independiente quiso traerlo a mediados del año pasado, pero la opción del León de México en ese momento fue más fuerte y no pudo hacerse. Después, en septiembre, Seoane estuvo charlando con Cabral durante el Salón de la Fama que se realizó en León y a partir de entonces quedó abierta la posibilidad de venir que acabó concretándose", cuenta Nicolás Puppo, representante del jugador, a La Nación.
El medio después revela la estructura del área que se dedica a la parte de las incorporaciones del club.
"El departamento de scouting del Rojo divide la búsqueda de nuevos jugadores en varias etapas: análisis futbolístico y estadístico, observación directa en la cancha (cuando es posible), estudio de la vida personal y profesional del candidato y, por fin, condiciones económicas iniciales para comenzar las negociaciones. Tras dos períodos de transferencias, nadie puede negar el buen ojo de los cazadores de talento que habitan el Libertadores de América. Los ejemplos abundan", disparan.
En esos "ejemplos que abundan", caen Loyola y Galdames. Sobre todo el formado en Colo Colo, pieza clave del club y uno de los más queridos por los hinchas.
"Loyola, si bien había llamado la atención de varios equipos argentinos, no era más que un lateral-volante prometedor en el Huachipato trasandino (...) Galdames había dejado buenas sensaciones en su paso por Vélez, pero estaba alejado de los focos", sostienen.
La Nación cierra con una potente reflexión: "Encontrar futbolistas que rindan en la cancha y mejoren el patrimonio de la institución con sus inevitables ventas al exterior es el objetivo de todos los buscadores de tesoros en los potreros y clubes de barrio del país. Independiente no es la excepción. Incluso ha demorado demasiado tiempo en profesionalizar a fondo una tarea indispensable para sostener el andamiaje de un equipo de fútbol. Este año empezaron a verse los primeros frutos de la tarea, esos que han logrado cambiarle el humor a la vereda roja de Avellaneda".