Monica Seles es una leyenda del tenis. Ganó nueve títulos de Grand Slam y su nombre está inscrito en el Salón de la Fama del Tenis Internacional.
La ex tenista, nacida hace 51 años en la antigua Yugoslavia y nacionalizada estadounidense, hizo un anuncio que impactó...
Seles reveló que padece miastenia gravis, una enfermedad autoinmune neuromuscular de la que habló durante una reciente entrevista con The Associated Press.
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Estaba jugando con algunos niños o miembros de la familia, y fallaba una pelota. Yo pensaba, 'estoy viendo dos pelotas'. Estos son obviamente síntomas que no puedes ignorar. Y, para mí, aquí es donde comenzó esto. Me tomó bastante tiempo realmente asimilarlo, hablar abiertamente sobre ello, porque es algo difícil. Afecta mi vida diaria bastante", confidenció Seles.
La ex jugadora, quien ganó su primer Grand Slam a los 16 años en Roland Garros 1990 y jugó su último partido en 2003, reveló que fue diagnosticada con miastenia gravis hace tres años. Quiso hablar públicamente sobre ello por primera vez antes para crear conciencia sobre lo que se conoce como MG.
El Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares lo describe como "una enfermedad neuromuscular crónica que causa debilidad en los músculos voluntarios" y "afecta más comúnmente a mujeres jóvenes adultas (menores de 40 años) y hombres mayores (mayores de 60 años), pero... puede ocurrir a cualquier edad, incluida la infancia".
Seles dijo que nunca había oído hablar de la condición hasta que vio a un médico y fue derivada a un neurólogo después de notar síntomas como visión doble y debilidad en sus brazos. "Simplemente secarme el cabello y piernas, se volvió muy difícil", contó.
"Cuando me diagnosticaron, pensé, '¡¿Qué?!'" dijo Seles, quien se ha asociado con argenx, una empresa de inmunología con sede en Holanda, para promover su campaña Go for Greater. "Así que aquí es donde, no puedo enfatizar lo suficiente, desearía haber tenido a alguien como yo que hablara sobre ello".
Quizás el momento más recordado de la carrera de Seles fue en 1993, cuando en el torneo de Hamburgo fue atacada con un cuchillo por un fanático en pleno partido. Le costó dos años regresar al tenis, y lo hizo llegando a la final del US Open 1995.
"La forma en que me recibieron... después de mi apuñalamiento, nunca lo olvidaré", dijo la ex tenista, refiriéndose a los fanáticos en Nueva York. "Esos son los momentos que se quedan contigo", disparó.
Su vida no ha sido fácil. Varias veces ha tenido que "reiniciarse", vivir "nuevas normalidades".
"Tuve que, en términos de tenis, supongo, reiniciar varias veces. Llamo a mi primer reinicio fuerte cuando vine a Estados Unidos como una joven de 13 años (desde Yugoslavia). No hablaba el idioma; dejé a mi familia. Es un momento muy difícil. Luego, obviamente, convertirme en una gran jugadora, también es un reinicio, porque la fama, el dinero, la atención, cambian todo, y es difícil como una joven de 16 años lidiar con todo eso. Luego, obviamente, mi apuñalamiento... tuve que hacer un gran reinicio”.
"Y luego, realmente, ser diagnosticada con miastenia gravis: otro reinicio. Pero una cosa, como les digo a los niños que mentoreo: 'Siempre tienes que ajustarte. Esa pelota está rebotando, y solo tienes que ajustarte'. Y eso es lo que estoy haciendo ahora".
