Colo Colo sufrió una humillante derrota 4-1 ante la Universidad Católica y se está afinando el acuerdo para que Jorge Almirón deje de ser el técnico de la institución.
"Buscaremos una salida armoniosa, él entregó grandes cosas. Su salida se debe dar con un ambiente de armonía entre ambas partes", afirmó el presidente de Blanco y Negro, Aníbal Mosa.
Almirón llegó este sábado al Monumental vistiendo completamente de negro. Cuando la voz del estadio anunció la formación del "Cacique" y luego nombró al DT se escuchó una estruendosa pifiadera.
En el fútbol los estados de ánimo pueden cambiar rápidamente. El cariño que le profesaban los fanáticos el año pasado al ex Boca por el título en el Torneo Nacional y los cuartos de Copa Libertadores ya se evaporó.
El elenco albo antes del minuto estaba abajo en el marcador. A Almirón se le veía muy molesto por los problemas que tenía su equipo para salir jugando desde el fondo y, además, se ganó una advertencia del árbitro luego de excederse en el reclamo por una falta. Quizá considerando que venía de una expulsión, ofreció disculpas.
Después del segundo gol de de la UC, a los doce minutos, a Almirón se le vio muy frustrado. Se paseaba nervioso y se llevó las manos a la cabeza luego de una falta cerca del área que terminaría en un nuevo tanto de la visita.
El público estaba impaciente e irritable. Un grupo se instaló detrás de la banca. Allí, separados por el cristal, le hicieron sentir toda su molestia al DT.
Los insultos a Almirón eran constantes y aumentaron cuando decidió mandar a la cancha al cuestionado Esteban Pavez.
Poco después, todo el Monumental cantó: "Ohh, Almirón ya se va, ya se va, Almirón ya se va".
Tras el final del encuentro, el argentino se quedó pasmado con las manos en la cintura por cerca de un minuto, casi sin hacer ningún otro movimiento.
Entró a la cancha con pasos cortos, dubitativos y se acercó a saludar a algunos de sus futbolistas.
En el camarín lo esperaba su representante, Pablo del Río, y Aníbal Mosa. Estuvieron reunidos un buen rato.
Almirón se demoró en llegar a la sala donde dio la conferencia de prensa. Hace unos meses, cuando lo quisieron despedir, él dijo sentirse fuerte para seguir y se aferró al cargo, pero hoy estaba golpeado.
No aceptó preguntas y dijo: "Estaba hablando con el presidente, y con mi representante están en charla, vamos a seguir hablando, tal vez es un momento de descomprimir. El resultado es insólito, en menos de un minuto te hacen un gol y después en el segundo tiempo es lo mismo. Es un golpe duro, entiendo a la gente. No tiene mucho sentido responder preguntas".
El único jugador de Colo Colo que habló en zona mixta fue Emiliano Amor. Defendió al entrenador e hizo autocrítica.
"No hablamos con él, pero sí lo respaldamos. A la cancha entramos once, todos lo hicimos mal. No hay que buscar culpables", comentó.
A Almirón en mayo no se le pudo despedir por un tema económico. Sin embargo, ahora el técnico está dispuesto a llegar a un acuerdo.
Su aventura en el "Cacique" termina de la peor manera.
