El partido entre la U e Independiente en Argentina por la Copa Sudamericana terminó en escándalo. La Conmebol "canceló" el encuentro cuando se jugaban los primeros minutos del segundo tiempo.
Después de graves incidentes, se ordenó que la barra azul desalojara el estadio Libertadores de América. Cuando quedaban muy pocos hinchas chilenos, gente de Independiente irrumpió en la tribuna visitante y lo que pasó después fue una barbarie.
Hubo muchos heridos. El que estaba más grave era Gonzalo Alfaro. El hombre de 33 años, padre de tres hijas, llegó con riesgo vital al Hospital Doctor Pedro Fiorito de Avellaneda. Lo operaron por un traumatismo craneoencefálico y posteriormente quedó internado en la Unidad de Terapia Intensiva.
Familiares viajaron hasta Argentina para acompañarlo y su padre, llamado Marcial, explicó: "Mi hijo Gonzalo se encuentra en estado crítico, ya que tuvieron que hacerle una operación al cráneo, ya que se encontraba con una fractura de cráneo. Esto llevó a que los huesos rotos tuvieran que ser retirados por los cirujanos. Fue una operación de alto riesgo, por lo cual su cerebro se le hinchó y debieron aplicar un catéter en su cerebro".
Afortunadamente, y según pudo saber Emol, el fanático de la U ha evolucionado positivamente en las últimas horas. Ya fue desentubado y recuperó la conciencia. Sus padres lo pudieron visitar.
El club apoyó a todos los detenidos esa triste noche y también a los heridos. La identificación de estos últimos se pudo lograr debido a que los dirigentes estuvieron recorriendo hospitales. No había información policial.
El enojo de Lorenzetti por polémico video del "Rojo"
Este sábado, Independiente publicó un video repasando los desmanes que ocurrieron en su estadio y nuevamente apuntó a los fanáticos de la Universidad de Chile.
"Quedará marcado como uno de los días más tristes y oscuros en la historia del fútbol argentino y continental. Lo que se vivió es algo que jamás pensamos que podríamos vivir. Una noche que debía ser de fútbol, terminó convertida en una pesadilla", manifestó.
El "Rojo" habló de un "ataque cobarde y planificado" y aseguró que el estadio "fue atacado con una brutalidad sin precedentes".
El club de Avellaneda, sin embargo, dedicó algunos palabras a los barristas que golpearon salvajemente a los chilenos.
"Nos estamos encargando de identificar a estos delincuentes que se esconden detrás de un escudo para expulsarlos como socios y solicitar que nunca más pisen una cancha de fútbol. Ya estamos colaborando con la justicia para lograrlo".
A Gustavo Lorenzetti, ex jugador se la U, no le gustó nada el video y cargó duro contra Nestor Grindetti, el presidente del equipo trasandino.
"El nivel de cinismo que maneja el club presidido por Grindetti es vergonzoso, intentando desligarse de cualquier responsabilidad, pero no me extraña. De fútbol no entiende nada, no tiene tribuna, es político (así estamos en este país con ese tema). Valoro mucho las páginas y la gente que intenta tener cordura en este momento complicado, que tratan de parar esta escalada de violencia que no lleva a ninguna parte, este video parcial, en este momento no ayuda", dijo el campeón de la Copa Sudamericana el 2011.
