Pablo Lemoine, head coach de los "Cóndores" que lograron su segunda clasificación seguida a un Mundial de rubgy, sorprendió y dio una larga entrevista al prestigioso diario británico The Guardian.
El uruguayo aprovechó la vitrina y volvió a disparar contra World Rugby, el ente que regular el rugby a nivel planetario.
"El rugby chileno recibió el mismo dinero para el sistema de alto rendimiento durante los últimos tres años. El dinero no es suficiente. Pero peor aún, la demanda es mayor porque nos estamos preparando para un Mundial", comenzó criticando, reconociendo la falta de apoyo.
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Entiendo que World Rugby tiene problemas financieros, pero no creo que sea correcto ir contra un país que está trabajando duro, de manera profesional, como exigen. No estoy contento con eso, pero seguiremos luchando. Aceptamos la realidad", agregó Lemoine.
Consultado por los problemas del rugby a nivel mundial, el ex rugbista analizó que "necesitamos debatir cómo puede crecer el rugby. Está claramente en problemas incluso en países como Gales, países famosos por su rugby. No funciona. Los países más grandes del mundo no juegan al rugby. En China, India y Pakistán hay miles de millones de aficionados potenciales".
Sobre el Mundial, que se jugará en Australia 2027, fue crítico con el grupo que le tocó a Chile, con Australia, Nueva Zelanda y Hong-Kong.
"Cuando países como Chile juegan una Copa Mundial, se necesita una visión general. Pensar solo en el deporte es fantástico, es impresionante.
Pero pensar en el impacto real que Chile necesita: programas de desarrollo, impacto político, impacto social... para nuestros aficionados, es mucho más difícil encontrar entradas cuando juegas contra los All Blacks o Australia", manifestó.
De igual manera se mostró esperanzado de volver a hacer historia ganando el primer partido en un Mundial.
"Tenemos la oportunidad de ganar nuestro primer partido en una Copa Mundial. Hong Kong tiene la misma oportunidad. Será enorme. Intentaremos clasificarnos para la siguiente fase, pero será difícil conseguir puntos extra contra Australia y Nueva Zelanda. Nuestra final es Hong Kong", dijo.
Sobre el partido ante los All Blacks de Nueva Zelanda y Australia, fue sincero: "Mi ambición no es vencer a los All Blacks. En el alto rendimiento, cuando les das un mensaje a los jugadores, tienen que creerte. Todos conocen la realidad contra Nueva Zelanda o Australia".
Finalmente, cerró: "Soy un entrenador muy honesto, fui un jugador honesto. Conozco mis fortalezas y mis debilidades. Siempre mantuve un perfil bajo porque soy una persona sencilla: no me gusta hablar de mí. Mis equipos tienen tres valores claros: humildad, respeto y ambición. Fui profesional, pero en toda mi carrera en Uruguay, nunca gané un solo dólar".
