En Doha, Qatar, se está desarrollando el Campeonato Mundial de Ajedrez Rápido y Blitz y la segunda jornada, finalizada ayer sábado, tuvo un hecho que está marcando la cita.
El noruego Magnus Carlsen, número uno del mundo, cayó ante el ruso Vladislav Artémiev, de 27 años, que está liderando la clasificación junto al estadounidense Hans Niemann.
Artémiev se impuso al principal favorito en la séptima ronda tras engañarle en la apertura y rematarlo sin fallo.
Luego de eso vino la explosión de Carlsen. Abandonó la sala visiblemente afectado por la derrota y con claros gestos de frustración. En su camino a la salida de la sala llegó a golpear a una cámara de televisión de un medio de la organización, que seguía sus pasos.
Según informó el medio local Dagbladet, el propio Magnus Carlsen brindó declaraciones con NRK -medio al que pertenecía la cámara- después de la derrota, aunque no hizo hincapié en el altercado con la. "Simplemente muy mal. Acepté voluntariamente una mala posición. Me ofreció tablas. No las acepté y sacrifiqué calidad en la siguiente jugada. Sigo cansado de ayer, simplemente. Estoy prácticamente descansado, pero tengo el sistema nervioso un poco inestable", argumentó el Gran Maestro de 35 años.
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