SANTIAGO.-
Clint Eastwood vuelve a la pantalla grande de la mano de
"15:17 Tren a París", una producción que adapta un hecho verídico ocurrido en Francia el 2015.
En agosto de ese año, tres jóvenes estadounidenses detuvieron a un terrorista armado y evitaron una masacre al interior de un tren de alta velocidad que viajaba de Ámsterdam a París con 554 pasajeros.
El actor y director estadounidense, tuvo la idea de llevar este hecho a la pantalla grande, con el desafío de que los protagonistas fueran los mismos que concretaron el heroico acto.
A sus 87 años, Eastwood demostró que puede seguir innovando y reinstaló a los personajes en el lugar de los hechos, olvidando el casting que ya había iniciado para los tres papeles protagónicos. Varios de los pasajeros del tren también quisieron estar en la película.
El trío que fue condecorado por las autoridades francesas, está compuesto por Anthony Sadler, Alek Skarlatos -especialista de la Guardia Nacional del Ejército de Oregón- y Spencer Stone -miembro de la Fuerza Aérea de Estados Unidos- quienes se interpretan a sí mismos en la película. A su lado se encuentran las profesionales Judy Greer y Jenna Fischer.
El resultado en el cine
Un trío de amigos, que llevaban varios años sin verse, se reúnen para viajar por Europa y conocer algunas de las principales ciudades. Tras su paso por Roma, Venecia y Ámsterdam, deciden concretar el viaje que tenían en duda: París.
Desde Ámsterdam tomaron el tren rápido a la capital francesa. Todo parecía estar tranquilo hasta que descubrieron que un hombre armado había herido a una persona y esperaba concretar varios otros tiros.
Pese a que este es el clímax de la película, corresponde a una tercera parte de ella. Los otros dos tercios están dedicados a explicar la vida de los tres jóvenes que se convirtieron en héroes en un país muy lejano a su natal Estados Unidos.
Su afán por la milicia desde la infancia, su lucha por ingresar a las Fuerzas Armadas y sus frustraciones por no encontrar el sentido a sus vidas, son parte de la trama, la que se puede tornar lenta y en varias ocasiones, innecesaria.
Personajes que intervienen sin razón alguna, detalles que no tuvieron el desarrollo esperado y actuaciones un tanto planas, pueden molestar en varios minutos de la cinta, pero no deja de intrigar el desenlace.
Aunque con un fin predecible, vale la pena esperar las escenas de acción.
"15:17 Tren a París" llegó esta semana a las salas nacionales y se espera que se mantenga en cartelera hasta fines de febrero.
