Benito Cerati regresa a Santiago con su banda: "Chile es parte de mi persona"

SANTIAGO.- La primera vez que el mundo vio a Benito Cerati fue en el videoclip de "Te llevo para que me lleves" de Gustavo Cerati, donde también aparece la madre de los dos hijos del fallecido cantante, Cecilia Amenábar. Ahí se pudieron escuchar los latidos del corazón del primer hijo del astro argentino, que entonces estaba en gestación.

Años después, en su niñez, Benito mostró sus habilidades con la música, creando su primer álbum a temprana edad. Más adelante, ese mismo chico ayudaría a su padre a componer canciones para sus futuros discos, como Ahí Vamos y Fuerza Natural.

Sin dudas, un gran talento en la música que se ve reflejado en su trabajo en la banda Zero Kill, cuyo primer disco rock, como él mismo lo llama, lo tendrá de vuelta a Chile, lugar donde nació, para presentarse en el Teatro Nescafé de las Artes en Providencia.

En conversación con Emol, Benito Cerati reveló qué trae su álbum Unisex, sus influencias y el regreso a su país de origen.

- David Bowie siempre ha sido una influencia. A mí me gustan harto los artistas camaleónicos. Es lo que más rescato de los músicos en general, que siempre estén cambiando, mutando; y yo siempre intento llevar eso a mi trabajo.

Soy muy variado en la música y trato de implementar de todo un poco. En este caso yo venía haciendo temas más atmosféricos, más "down tempo", un poco más electrónico. Y este disco es el primer cambio pensado. Quería hacer otra cosa, algo más inspirado en el grunge, bien parecido a lo que sucedía con los Smiths o R.E.M en los '80, que daban una respuesta alternativa al pop.

- ¿Siempre te ha gustado el Glam Rock? ¿Es la base de tu música?

- No, no creo que sea la base de mi música. Creo que lo que rescato del Glam Rock es la transgresión de la imagen, después el New wave lo llevó hacia otro extremo, pero en cuanto a la imagen tomo mucho de eso para mostrar lo que quiere mostrar Unisex, que es liberación. Esa estética me llama la atención.

El disco es una forma consciente de hacer un trabajo más rockero, no porque me guste más el rock, pero tengo la cultura rock desde que nací.

Pero bueno, mis orígenes son mucho más experimentales. Yo siempre fui muy electrónico en general. En resumen quise ver cómo se manejaba el rock en Zero Kill.

- ¿Cómo se siente volver a Chile? Un lugar que también es tu tierra...

- Muy bien. Como este disco es muy mío, digamos en cuanto a cómo me presento o las cosas que estoy comunicando, etcétera, siento que era muy necesario venir a Chile porque es un lugar muy importante para mí, ya que representa mi infancia, nacimiento y tengo mucha familia y amigos allí. Y como esto es un disco que tiene ver conmigo, con mi crecimiento, era inevitable querer que Chile forme parte de eso. Por esa razón siempre vamos a tocar, como el año pasado. Vinimos a pesar de que no estaba listo el disco, pero quería verlo crecer allá porque Chile es parte de mi persona.

- ¿Te sientes identificado con lo que es el chileno?

- La verdad yo no me siento identificado con nada en general. Cuando intento identificarme con algo, termino fracasando y pasándolo mal. Soy poco binario, no creo en eso de yo soy chileno o argentino. Te sientes más como un ciudadano del mundo. De repente te das cuenta que vas a un lugar, los pisás y te constituyes. Inclusive un viaje de un mes te forma. Me cuesta colocarme una etiqueta de eso.


Benito tocando en el Metro. Crédito: El Mercurio.

- Una vez que viniste a Chile te presentaste en el metro. Y luego te sacaste un par de fotografías dentro del vagón, al igual como lo hizo tu padre hace décadas atrás. ¿Cómo fue revivir algo que es muy icónico de Gustavo Cerati?

- La verdad es que yo no fui con esa intención. Se publicitó así con la idea de captar la atención, pero mi idea era tocar en el metro. Pero realmente nunca se habló de recrear nada.

Después se eligió publicitar así, lo cual yo no estuve muy de acuerdo sobre todo porque no era mi intención.

- Fue inevitable que la gente lo relacionara...

- Claro, pero uno no pude estar peleando siempre contra eso, porque si no me volvería loco. La verdad es que fueron fotos, y una salió igual a la de mi padre y la usaron para publicitarlo de esa forma.

A mí me gusta vivir en el presente, y no me dejan despegar del pasado y me lo extraen constantemente, cosa que no quiero. El pasado ya lo tengo cerradito e integrado a mí. Pero sin dudas fue una experiencia muy linda.

- ¿A quién le diriges tu música?

- A quien quiera escucharla realmente. No hay público determinado ni le estoy cantando a cierta gente, porque eso sería cerrarme la verdad. Como que básicamente estaría diciendo "hola soy yo, y bueno te caigo bien o no".

- ¿Cuánto es la influencia musical que te dejó tu padre y cómo se ve reflejada en tu trabajo?

- En cuanto a la música, no hay mucho más que lo de un artista que me movió mucho y que me enseño muchas cosas. Imagínate que cuando yo era chico pensaba que mis padres eran los que le hacían la música a todo el mundo. Yo escuchaba a cualquier artista y pensaba que eran mi mamá, mi papá o algún familiar, entonces yo debía seguir con esto y seguir creando. La lista puede ser interminable. Pero en resumido, yo creo mi padre me dio la curiosidad. El salir de tu zona de confort, porque así se aprende más al tener un desafío constante.