La
Gaviota de Plata y la Gaviota de Oro se llevó el comediante nacional,
Pedro Ruminot, en la última jornada del
Festival de Viña, consagrándose además como una de las rutinas de humor más aplaudidas de esta versión del certamen.
Ruminot estuvo cerca de 80 minutos sobre el escenario y su presentación estuvo marcada por hitos que se mantuvieron al público constantemente interactuando con él. Alusiones a su familia, invitados especiales y la música, cimentaron su triunfo.
La crisis social
A penas ingresó al escenario guardó un largo silencio permitiendo que "El Mounstruo" pudiera gritar algunas consignas en contra del
Presidente Sebastián Piñera y él respondió con gritos alusivos a Carabineros, con eso logró la inmediata conexión con el público en su mayoría juvenil considerando los cantantes que anoche se presentaron:
Ozuna, Denise Rosenthal y Noche de Brujas.
Ruminot anunció entonces que durante todo su show se referiría a la crisis social y así fue, siendo aplaudido cada vez.
Su esposa, los hijos y la familia
Luego, en la primera parte de su rutina, el humorista conocido por su participación en El Club de la Comedia se centró en historias familiares. Como los exámenes que debió hacerse con su esposa, la también comediante Alison Mandel, en medio del tratamiento para poder tener hijos (ella ahora está embarazada). Además contó la relación que tiene con sus otros hijos revelando que el más pequeño "lo amor con la vida, pero me cae mal".
También contó la historia de una familia chilena a la que supuestamente vio cuando estaba de luna de miel en Miami. Los imitó, contó cómo disfruta el turista nacional en playas extranjeras más cálidas, lo que se sorprenden al estar en un All Inclusive y otras anécdotas, provocando la risa del público.
Alvarito
En su constante interacción directa con algunas personas que estaban en el público, conoció a un joven que estaba en las primeras filas identificado como Álvaro, o Alvarito como él le llamó al joven que contó desde su asiento que nació en 1999. Con eso Ruminot comenzó a contar la realidad de quienes tienen entre 30 y 40 años, recalcándole que "tu lo tienes todo, lo puedes cambiar todo".
Al veinteañero de frondoso cabello le explicó que quienes eran adolescente en la década de los '90 cantaban canciones muy diferentes a las actuales, especialmente al reguetón. Le reveló que antes se bailaban canciones "sin letras", imitando los complejos acordes de algunos hits de antaño y también canciones que daban instrucciones como "si bailas cachete con cachete, pechito con pechito y obligo con ombligo...", enfatizando en lo que complejo que era aquello.
Todas estas las cantó, bailó y el público de manera fluida le respondió coreando y bailando todo lo que él propuso.
La tía Bernarda y su mamá
Al hablar sobre sus historias familiares, Ruminot contó cómo se comunica ahora con su mamá desde que le compró un teléfono al que puede acceder a WhatsApp, generando la inmediata identificación del público que disfrutó esta parte con reiteradas carcajadas.
Según dijo ella se preocupa mucho por él, incluso a sus 39 años.
"¿Comió? ¿Se abrigó?" son algunas de las preguntas que su mamá le hace repetidas veces, mujer que resalta que está "sola".
Pero su mamá tiene una hermana llamada
Bernarda Torres Araneda que es la madrina del comediante. Según contó su poca destreza con las redes sociales han provocado que él la mencione en todas sus rutinas y gente la agregue y le publique comentarios en su Facebook. En ese momento le pidió al periodista
Francisco Saavedra, quien fue parte del jurado del Festival, que verificara que ella realmente está en esa red social, y este mostró desde su celular que efectivamente existe el perfil, desatando las risas.
Ahí continuó con el tono musical de su rutina e imitó a su tía y su mamá, cuando sin manda de por medio, peregrinan a Lo Vásquez: lo hacen de rodillas y entonando un
"medley católico" que imitó con pasión.
(Ruminot se llevó las dos Gaviotas. Crédito Aton)Maroon 5
Aludiendo a la polémica que se generó la noche anterior con el grupo Maroon 5 en el Festival, donde la crítica y el público cuestionó el desgano de su vocalista, Adam Levine, al presentarse en la Quinta Vergara, Ruminot aseguró que él tampoco tenía ganas de estar ahí. Y luego acusó al cantante de "pesado", recibiendo aplausos.
Esto no terminó ahí, pues horas después de terminado el show del humorista, en redes sociales se viralizó un video donde hizo una parodia a la molestia de Levin al salir del escenario, recalcando que no sabía que no era un festival televisado.
Barticciotto y El Símbolo
Los momentos más altos y llamativos de su espectáculo se dieron cuando de manera sorpresiva aparecieron sobre el escenario el ex futbolista Marcelo Pablo Barticciotto y el vocalista de El Símbolo, Frank Madero.
Ruminot contó que el ex jugador de Colo Colo era su ídolo de juventud y recordó su paso por el Festival en 1999 cuando junto a Keko Yungue cantó "Ya nada es importante". Con guitarra en mano el humorista le cantó a los más jóvenes el hit noventero y cuando nadie se lo esperaba apareció sobre el escenario la orquesta oficial del certamen y el comentarista de fútbol también coreando su gran éxito.
El peak de la rutina se vivió con esa presentación incluso inmediatamente después de eso recibió la primera Gaviota en manos del futbolista.
Luego y cuando le contaba a "Alvarito" que antes las canciones invitaban a seguir instrucciones, recordó la de El Símbolo "1,2,3", la que nuevamente el público coreó y bailó. Pero él los emplazó a "hacerlo bien" y para eso ingresó de manera inesperada el energético vocalista de la banda argentina, haciendo bailar incluso a los animadores María Luisa Godoy y Martín Cárcamo.
