Shiori Ito (en la fotografía) fue violada por Noriyuki Yamaguchi, un reconocido periodista japonés, mientras estaba inconsciente. Su agresor nunca enfrentó un juicio penal y solo fue condenado por un tribunal civil a indemnizarla.
AFP
El documental
"Black Box Diaries", nominado al Oscar, donde
la reportera Shiori Ito, abanderada del #MeToo en Japón,
relata la violación de la que fue víctima por parte de un conocido periodista,
es objeto de una creciente polémica legal.
Estrenado en enero del pasado año en el Sundance Film Festival, el documental,
nominado a otros premios como los BAFTA que se otorgaron la pasada semana, se enfrenta a títulos como "No other land" y "Sugarcane" en la categoría de Mejor largometraje documental de la Academia de Cine de Estados Unidos.
Con esta producción, protagonizada, escrita y dirigida por Shiori Ito,
la periodista se convierte en investigadora de su propia agresión sexual y trata de procesar a su violador, Noriyuki Yamaguchi, exjefe de la oficina de Washington de la cadena de televisión Tokyo Broadcasting System Inc. y biógrafo del ex Primer Ministro nipón Shinzo Abe.
"Black Box Diaries" es un relato en primera persona de un
caso histórico que marcó a la sociedad japonesa. En él, Ito
combina con maestría videos en los que cuenta su experiencia y testimonios reales para todo el proceso judicial que duró ocho años y medio,
en algunos casos grabados de forma oculta o sin el conocimiento de sus protagonistas, lo que constituye el principal motivo de la polémica.
En los primeros minutos del largometraje aparece la grabación de una cámara de seguridad del hotel donde tuvieron lugar los hechos, en la que se muestra cómo Yamaguchi saca a Ito de un taxi en contra de su voluntad (ella iba casi inconsciente después de haber bebido durante una cena con su agresor) y la sujeta hasta entrar en el hotel.
Aún no se estrena en cines nipones
A pesar de haber llegado a las pantallas de más de 50 países y haber participado en numerosos festivales,
"Black Box Diaries" aún no se ha estrenado en Japón a causa de la polémica legal en torno a la cinta.
Los abogados Katsuhiko Tsukuda -experto en difamación-, Yoko Nishihiro y Yukiko Tsunoda -ambas pertenecientes al equipo legal de Ito en su proceso contra Yamaguchi- alegan haber solicitado a la periodista que elimine la grabación de las cámaras de seguridad del hotel, y que distorsione la cara y las voces de algunos implicados como el taxista o un investigador policial.
Para ellos,
Shiori Ito habría "vulnerado los derechos humanos" de algunas personas que aparecen en el documental, porque "carece de su consentimiento para utilizar sus videos y conversaciones".
En octubre de 2024, ante la inacción de Ito y mientras el documental continuaba proyectándose en cines y plataformas de todo el mundo, los abogados decidieron hacer público el asunto.
"
Si quería contar su historia con una película debería haberlo hecho con integridad, asegurando el consentimiento de aquellos involucrados y asegurándose de que nadie resultaba perjudicado en el proceso", dijo Nishiro en una rueda de prensa realizada el jueves en el Club de Corresponsales Extranjeros de Japón.
Desde el punto de vista de los abogados, con este documental
Ito "se está saltando la ética del periodismo al no proteger a sus fuentes y no tiene el consentimiento de las partes para publicarlo", explicaron los letrados ante medios internacionales.
"Creemos que tanto Ito como la comunidad internacional deberían ser críticos sobre si esta película ha sido evaluada correctamente en tema de derechos humanos y cuestiones éticas", destacó Katsuhiko Tsukuda.
Directora se disculpa
Este viernes y a través de un comunicado,
Ito abordó la polémica, ofreció disculpas y declaró su intención de modificar las partes necesarias para que a los involucrados no se les pueda reconocer.
La directora también
explicó que las imágenes fueron editadas previamente para que no se pudiese reconocer a nadie, pero que tenía que usarlas, al considerarlas "esenciales" para poder transmitir la realidad de la violencia sexual y "la única prueba visual". "Dimos importancia al interés público", añadió.
Y es que
el caso de Ito cambió la ley japonesa. La periodista estaba inconsciente cuando Yamaguchi la violó en su hotel en 2015, después de un encuentro entre ambos porque él le había prometido ayuda para encontrar un trabajo.
Dos años más tarde y ante el estancamiento de la investigación policial, Ito decidió hacer público el asunto.
Parte de la sociedad nipona la criticó al considerar su comportamiento como inadecuado y las redes sociales se llenaron de mensajes que incluso cuestionaban su nacionalidad, "porque una auténtica japonesa no hablaría de cosas tan vergonzosas", según una de las menciones en línea.
Aun así, su testimonio fue clave para promover cambios en la legislación del país y, en 2023, la Dieta (Parlamento japonés) reformó la definición de violación al eliminar la violencia como requisito y considerar la falta de consentimiento como factor determinante, junto a otras modificaciones.
El cambio llegó tarde para Ito porque su agresor nunca se enfrentó a un juicio penal. Hubo una orden de detención contra él pero el arresto nunca se efectuó porque el entonces jefe de la división de investigación criminal de la policía tokiota ordenó que se paralizara y la fiscalía retiró todos los cargos alegando falta de pruebas.
La única sentencia que hubo contra Yamaguchi fue en un tribunal civil que lo condenó a indemnizar económicamente a Ito.