, centrado en películas de asesinos seriales, fue sensación durante las décadas de los '80 y '90. Muchas de las franquicias más populares de ese período, como "Scream" o "Viernes 13", han intentado recapturar ese éxito en la actualidad, con resultados dispares. Ahora es el turno de
con la misma energía de antaño.
La película sigue a
cinco veinteañeros que, tras una noche de festejos, cometen un error que desencadena un accidente fatal. Para evitar problemas con la ley,
el grupo hace un pacto de silencio, prometiendo no revelar lo sucedido. Un año después,
los involucrados reciben una nota amenazante que no solo revela que
alguien sabe lo que hicieron, sino que también marca el
inicio de una serie de asesinatos en el tranquilo pueblo de Southport.
"Sé lo que hicieron el año pasado" es una secuela que se viste como algo nuevo, pero que
en su gancho esconde la nostalgia que hunde las virtudes de esta nueva adaptación. Con momentos entretenidos y un extraño final, en esta nota revisamos
lo bueno y lo malo del regreso de Jennifer Love Hewitt, Freddie Prince Jr. y el asesino con el garfio.
De regreso a los '90
Intentar capturar la energía de hace 30 años no es una mala idea. Sin embargo, es necesario entender que
algunas cosas funcionaban mejor en su tiempo. Cuando una película de terror plantea la existencia de un asesino suelto en un pueblo residencial, debe encontrar formas efectivas de transmitir esa tensión, considerando que hoy vivimos en un mundo más violento e híper conectado.
Esta adaptación comete el
error de apegarse a las persecuciones convencionales para inquietar al espectador, lo cual es poco efectivo. El asesino del garfio no es un ente amenazante en el contexto actual y la película, en vez de crear instancias nuevas, espera que creamos que siempre hay una coincidencia que deja a los personajes solos e indefensos en lugares peligrosos. Es forzado, poco orgánico y, tras repetirse varias veces, pierde todo impacto.
La cinta intenta compensar esto con un
tono más ligero y cargado de humor, lo que le da un ritmo dinámico y más entretenido. Esto la diferencia de las entregas anteriores, aunque no lo suficiente frente a la gran cantidad de películas similares que han surgido desde entonces. Es una buena dirección, sí, pero este nuevo tono también diluye parte de la tensión esencial que se espera en este subgénero.
Al final,
la cinta no comprende que lo que daba miedo en los '90 no necesariamente asusta hoy.
Freddie Prinze Jr. interpreta a Ray Bronson, un personaje que tiene un papel significativo dentro del misterio central. Crédito: Sony Pictures.Personajes nuevos y viejos
El mayor acierto de esta nueva entrega está en su elenco. Los cinco actores que interpretan al nuevo grupo de jóvenes adultos logran reflejar actitudes actuales frente a situaciones extremas, creando una dinámica interesante entre amistad y peligro. Cada arquetipo
-el chico bueno, la rebelde, el escéptico
- tiene un rol claro y bien desarrollado en la historia, y la película logra mantener un buen equilibrio entre ellos.
Por desgracia, esta adaptación
cae en uno de los errores clásicos de las secuelas legado: la inclusión forzada de personajes antiguos. Por muy querida que sea
Jennifer Love Hewitt, si su personaje no tiene una entrada orgánica en la trama, lo más sensato sería dejarla fuera.
Su presencia, además de ser crucial en el desenlace, termina eclipsando al nuevo elenco justo cuando empezaban a consolidarse dentro de la franquicia.
Caso contrario es el de
Freddie Prinze Jr. Su personaje, Ray Bronson, tiene un papel significativo dentro del misterio central, y
su regreso se siente natural y justificado. Él demuestra el potencial que esta película pudo alcanzar si se hubiera atrevido a despegarse un poco más de la cinta original de 1997.
El final (sin spoilers)
El gran motor de las películas slasher es su clímax, donde el misterio, la acción y el terror culminan en una revelación. El final no es simplemente "la guinda de la torta", sino que es la parte más importante. Por eso, la experiencia completa depende en gran medida de cómo se maneja el desenlace.
En este caso,
el final funciona bien a nivel conceptual, pero falla en su ejecución. Aunque el misterio está correctamente planteado
-y aunque las escenas de muerte no logran generar demasiada tensión
-, al menos la intriga se mantiene viva hasta el último acto. El problema es que
cuando llegan las revelaciones, la explicación es tan desordenada y poco clara que diluye todo el impacto que se había construido. La película quiere que la sorpresa suene inteligente, pero
termina siendo más predecible de lo esperado, principalmente porque el guion no logra desatar bien el nudo que había armado.
Al final del día,
"Sé lo que hicieron el año pasado" es una entrega entretenida para quienes son fanáticos del género,
pero no una película memorable más allá del regreso de algunos rostros conocidos.
La franquicia parece apuntar hacia una nueva historia centrada en Julie James, así que solo queda esperar qué cosas nuevas se pueden contar sobre el asesino del garfio.
Nota: 2,8/5,0"Sé lo que hicieron el año pasado" ya está disponible
en cines.
