MOSCÚ.- El Presidente ruso Vladimir Putin criticó el lunes a Lenin acusándolo de haber colocado "una bomba de tiempo" bajo el estado soviético y denunció la represión brutal del gobierno bolchevique.
Las duras críticas a Lenin, que sigue siendo reverenciado por los comunistas y por muchos otros en Rusia, son inusuales para Putin, quien anteriormente sopesó cuidadosamente sus comentarios sobre la historia de la nación para evitar alienar a determinados votantes.
A la vez, indicó que el gobierno no tiene intención de retirar el cadáver de Lenin de su tumba en la Plaza Roja y advirtió contra "toda medida que divida la sociedad".
La evaluación que hizo Putin sobre el papel de Lenin en la historia rusa durante la reunión del lunes con activistas partidarios del Kremlin en la ciudad sureña de Stavropol, fue marcadamente más negativa que anteriormente.
Putin denunció a Lenin y su gobierno por ejecutar de manera brutal al último zar ruso junto con toda su familia y sus sirvientes, además de miles de sacerdotes y por haber colocado "una bomba de tiempo" en las bases del estado ruso al trazar fronteras administrativas siguiendo las líneas étnicas.
Como ejemplo sobre el legado "destructivo" de Lenin, Putin mencionó Donbass, la región industrial en el este de Ucrania donde estalló una rebelión separatista prorrusa semanas después que Rusia se anexó la península ucraniana de Crimea en 2014. Más de nueve mil personas han muerto en el conflicto desde abril de 2015 y han continuado los enfrentamientos pese a un acuerdo de paz en febrero de ese año.
Agregó que Lenin y su gobierno trazaron fronteras caprichosas entre regiones de la Unión Soviética colocando Donbass bajo jurisdicción ucraniana para "aumentar el porcentaje del proletariado" en una medida que Putin calificó de "delirante".
El comunismo como la Biblia
Aún así, el Presidente ruso confesó que le gusta tanto la ideología comunista como la socialista, y las comparó con las enseñanzas de la Biblia por sus ideales humanistas.
"Me gustaban mucho y me siguen gustando las ideas comunistas y socialistas. Si miramos el manual del 'constructor del comunismo' que se publicó profusamente en la Unión Soviética, recuerda mucho a la Biblia. No es una broma, en realidad es un extracto de la Biblia", dijo Putin, según medios locales.
Putin recordó que dicho manual incluía ideas muy acertadas, como igualdad, hermandad y felicidad.
"Pero la aplicación práctica de esas maravillosas ideas en nuestro país estuvo lejos de lo que exponían los socialistas utópicos. Nuestro país no se pareció a la Ciudad del Sol", declaró el jefe del Kremlin en Stávropol, en el sur de Rusia.
Putin subrayó que todo el mundo acusó a los zares de represión, pero la construcción del Estado soviético comenzó de esa misma forma, con represiones masivas.