MIAMI.- El presidente Barack Obama no irá a Cuba a cambiar el gobierno, sino a abogar por un mejor futuro para el pueblo cubano, afirmó su principal asesor este viernes en Miami, donde escuchó inquietudes de los cubano-estadounidenses de cara al viaje.
Obama defenderá los derechos humanos y se reunirá con miembros de la sociedad civil y disidentes, sin restricciones, garantizó el asesor Ben Rhodes en rueda de prensa en Miami, Florida (sureste de EEUU), donde reside la mayor parte de la diáspora cubana en Estados Unidos.
Las declaraciones de Rhodes, pieza clave en los contactos secretos que llevaron al anuncio del histórico deshielo entre Cuba y Estados Unidos en diciembre de 2014, se producen luego de que esta semana el diario oficial Granma asegurara que Cuba dará la bienvenida a Obama, pero sin hacer concesiones ni renunciar a "uno solo de sus principios".
"No vamos a ir para tumbar al gobierno y poner uno nuevo", señaló Rhodes, al dar detalles del viaje de Obama a la isla del 20 al 22 de marzo, el primero de un presidente estadounidense en 90 años.
"Esta es una oportunidad para que un presidente estadounidense se pare en La Habana, Cuba, y hable al pueblo cubano, tanto en Cuba como en Estados Unidos (...) y diga cuál es nuestra visión del futuro en términos de la relación bilateral y lo que queremos para el pueblo cubano", dijo Rhodes.