BRUSELAS.- El sospechoso abatido durante la
operación antiterrorista llevada a cabo en el distrito de Forest en la capital belga el pasado martes, Mohamed Belkaid, estaba listo para morir en un atentado suicida, informó este viernes la televisión pública flamenca VRT.
El argelino, que se encontraba de manera irregular en Bélgica y había cometido un robo menor en 2014, según confirmó la Fiscalía, fue abatido mientras disparaba con un kalashnikov por una ventana a las fuerzas de seguridad que participaron en la operación, que posteriormente encontraron junto a su cadáver el arma y un libro sobre salafismo (movimiento sunnita).
La cadena flamenca, según recoge el periódico Le Soir, tuvo acceso a ficheros con nombres de miles de reclutas del Estados Islámico (EI) y que contienen la dirección de esta persona y su función en el seno del grupo terrorista.
En el fichero de los servicios de seguridad se menciona además que la fecha de nacimiento de Mohamed Belkaid es el 9 de junio de 1980, en lugar del 9 de julio de ese mismo año, como se informó en un principio.
Durante el suceso del martes, que tuvo lugar durante un registro antiterrorista relacionado con los atentados del 13-N en París, resultaron heridos leves cuatro policías y otros dos sospechosos lograron huir, informaron la Fiscalía federal y la Policía.
Los dos tiroteos se produjeron en una zona próxima a la factoría de Audi en Bruselas.
El abatido combatía para el grupo terrorista EI desde el mes de abril de 2014.
Por otra parte, el ministro de Justicia belga, Koen Geens, dijo este viernes en una entrevista en la televisión RTL que Bélgica planea crear una base de huellas vocales, en el marco de la lucha contra el terrorismo yihadista.
Esas huellas, explicó el ministro, "son como las huellas digitales, cuando escuchamos una voz y que podemos registrar, más adelante puede compararse".