"Hemos detenido a algunos oficiales de la compañía constructora, estamos emprendiendo acciones contra ellos", indicó a la prensa el inspector de la Policía de la ciudad, Rajeev Kumar, durante una visita al lugar del suceso.
Las autoridades policiales de la comisaría de Posta, a cargo de la zona en la que ocurrió el derrumbe, impusieron además una denuncia contra la empresa por "asesinato e intento de asesinato", y por delito resultante en daños, indicó el jefe del cuartel, Nurul Absar.
Un portavoz del cuartel general de la Policía de Calcuta, el sargento S. Dass, dijo que las autoridades tienen abierta una investigación "en pleno desarrollo" para esclarecer los detalles de lo ocurrido y confirmó el registro de la denuncia.
Detalló que se investigan "todas las oficinas" de la constructora IVRCL en el país, no sólo en Calcuta, y se mostró convencido de que los resultados se darán a conocer "muy pronto".
Uno de los responsables de la compañía, K. Panduranga Rao, indicó ayer a los medios que lo ocurrido "no fue otra cosa que un acto de Dios", al asegurar que no había pasado nada de esto en 27 años.
Aumentan los fallecidos
En tanto un nuevo balance, indicó que la cantidad de personas fallecieron en el derrumbe aumentó a 24, y otros 76 resultaron heridos, de los que 14 continúan hospitalizados, indicó una fuente de la Policía local.
El paso elevado de unos dos kilómetros estaba siendo construido sobre una autopista en una zona comercial habitualmente muy concurrida en uno de los accesos del norte de la ciudad.
Estaba en construcción desde 2009 y debía estar terminado en 2012.
Los derrumbes son frecuentes en la India, a menudo debido al precario estado de las infraestructuras y a la falta de mantenimiento, factores alimentados por la corrupción y prácticas ilegales en el sector de la construcción.
