SANTIAGO.- Lejos de los 84 millones de televidentes que se sentaron a presenciar el debate entre los aspirantes a la Casa Blanca, Donald Trump y Hillary Clinton, este martes se enfrentarán por única vez sus compañeros de fórmula, Mike Pence y Tim Kaine, dos "desconocidos" para los estadounidenses que, más que elevar sus propias figuras, se espera que defiendan de los escándalos a sus candidatos presidenciales.
Bajo la sombra de los potentes y polémicos Trump y Clinton, Pence y Kaine, los candidatos a vicepresidente (VP) republicano y demócrata, respectivamente, son considerados "bajo perfil" y actores que tendrán como objetivo aterrizar la lucha entre los aspirantes presidenciales y atraer el voto de los indecisos.
¿Qué hace un vicepresidente en Estados Unidos?
Según la Constitución estadounidense, un vicepresidente tiene dos roles principales: reemplazar al Presidente y terminar su periodo en caso de que el Mandatario renuncie, fallezca o quede inhabilitado para gobernar por otros motivos, y actuar como presidente del Senado.
La edad de ambos candidatos presidenciales -Trump con 70 años y Hillary con 68-, hace que su salud sea un tema importante en la carrera por la Casa Blanca, por lo que la figura del vicepresidente toma un rol especial.
A pesar de lo anterior, la elección del compañero de fórmula se enfoca en general en una figura que ayude al candidato presidencial a atraer votos. Por eso, es indispensable saber qué puede aportar cada uno a la campaña de los aspirantes.
Tim Kaine
Tim Kaine es la opción de la candidata demócrata Hillary Clinton. Con 57 años, el actual senador por el estado de Virginia tiene una amplia experiencia política. Fue gobernador por el mismo estado, alcalde de Richmond y presidente del Comité Nacional Demócrata. Esto es un punto a favor: es una figura conocida por el estado en el que se llevará a cabo el debate y Virgina, además, es uno importante en los comicios.
Kaine habla español perfecto, debido a que pasó una temporada como misionero en Honduras, por lo que atraerá el voto latino. Pretende hacer lo mismo con el voto masculino.
Se prevé que durante el debate de este martes, Kaine tendrá que salir en defensa de las acusaciones contra Hillary por los correos electrónicos con información confidencial enviados desde su cuenta privada.
Mike Pence
El magnate y candidato republicano Donald Trump escogió a Mike Pence, gobernador del estado de Indiana, como su compañero de fórmula.
El cristiano evangélico de 58 años se desempeñó por más de diez años en el Congreso y se presenta como la figura "razonable" del dúo y representante de los valores tradicionales republicanos. Por eso, su rol será atraer al sector más conservador del Partido Republicano, a quienes no se identifican con Trump. También deberá buscar el voto femenino y afroamericano, muy vilipendiado por el multimillonario en sus declaraciones.
Son varias las razones por las que Pence tiene un escenario más difícil en el debate: Trump se ha visto envuelto en nuevo escándalos de no pago de impuestos y sobre el destino de las donaciones de su fundación. Además, Clinton fue declarada la ganadora del debate presidencial y Kaine estará debatiendo en su "casa".
¿Cómo?¿Cuándo?¿Dónde?
Este martes será el día en que se enfrentarán los compañeros de fórmula en la Universidad de Longwood, en Farmville, Virginia, a las 22:00 horas en Chile. Se trata de un espacio de 90 minutos, sin cortes comerciales y divididos en nueve segmentos de 10 minutos, en el que la moderadora, la periodista de CBS News Elaine Quijano, hará las preguntas y dará dos minutos a cada candidatos para responder.
Sólo están invitados Kaine y Pence, ya que según las normas de la Comisión de Debates Presidenciales, se llama a los aspirantes cuyo partido llega por lo menos al 15% de los votos. Por esto, quedan fuera de la cita Bill Weld (VP de Gary Johnson) y Ajamu Baraka (VP de Jill Stein). Johnson y Stein, quienes participan de la carrera presidencial, quedaron fuera del primer debate por la misma razón.
Se prevé que el debate de hoy no atraerá a la misma cantidad de televidentes que el protagonizado por Trump y Clinton la semana pasada, ni tampoco el interés que otros debates vicepresidenciales han levantado en otros años, como el de 2008 entre Sarah Palin y Joe Biden. Sin embargo, se cree que igualmente tendrá buena sintonía ya que no habrá transmisiones de eventos deportivos al mismo tiempo.