"Los increíbles patriotas de este estadio desafiaron a los analistas (...) y permitieron una victoria histórica para el trabajador y el pueblo estadounidense", dijo Trump.
AFP
WASHINGTON.- El Presidente electo de Estados Unidos Donald Trump cerró hoy su gira de agradecimiento tras su victoria electoral en un modesto estadio de Mobile (Alabama), donde el pasado verano comenzó a consolidarse su camino a la Casa Blanca.
"Aquí es donde todo comenzó", recordó en sus primera palabras en el Ladd-Peebles, el pequeño estadio local donde en agosto de 2015 se congregaron alrededor de 30.000 personas para escucharlo tras quedarse con la nominación presidencial republicana.
El Ladd-Peebles se convirtió en un símbolo al convertir en ídolo de masas al aquel entonces candidato republicano que nadie daba como favorito, pero que consiguió atraer a multitudes en estados del sur y del medio oeste del país para finalmente derrotar a la demócrata Hillary Clinton en los comicios del 8 de noviembre.
Hoy, una multitud algo más modesta, regresó para asistir al último evento del llamado "tour de agradecimiento" del presidente electo, que tomará posesión el 20 de enero, y que tras su paso por Alabama comenzará sus vacaciones navideñas en Florida.
"Los increíbles patriotas de este estadio desafiaron a los analistas, a los comentaristas políticos, y permitieron una victoria histórica para el trabajador y el pueblo estadounidense", exhortó Trump, que llegó acompañado de la lluvia.
Trump volvió a ser el orador de campaña, y prometió "drenar la ciénaga" de Washington, crear un país "seguro de nuevo" y la audiencia le pidió enardecida que construya el muro con México.
Volvió a relacionar delincuencia y narcotráfico con la inmigración indocumentada y repitió que construirá un "gran muro para parar la inmigración ilegal de una vez" y que sacará "de una maldita vez del país a los terroristas islamistas radicales".
Trump, que se llevó más de un 60% de los votos del estado de Alabama en las elecciones del pasado noviembre, estuvo acompañado hoy por el senador local Jeff Session, al que ha nominado para ser Fiscal General y será pieza clave para, entre otras cosas, acelerar la prometida deportación de inmigrantes o el cierre de fronteras a los refugiados sirios por miedo al terrorismo.
"Ganamos gastando menos dinero", aseguró Trump, quien dijo que del mismo modo se encargará de dirigir el país recortando gastos superfluos, y aprovechó para referirse a su oposición a proyectos que considera excesivamente onerosos como la construcción de un nuevo Air Force One por parte de Boeing o el desarrollo del caza F-35 por parte de Lockheed Martin.