El expresidente de Perú, Martín Vizcarra, (2018-2020) ingresó este jueves a la cárcel de Barbadillo al este de Lima, para cumplir con los cinco meses de prisión preventiva ordenada en su contra por presuntos sobornos. En el dicha prisión coincidirá con los también exmandatarios Alejandro Toledo, Ollanta Humala y Pedro Castillo.
Esta mañana Vizcarra fue conducido por la policía desde la carceleta -un tipo de prisión "temporal"- del Poder Judicial, en la que pasó la noche, hacia la sede del penal de Barbadillo en una camioneta fuertemente resguardada y seguida por medios de prensa.
Minutos antes, el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) informó a través de sus redes sociales que el procesado Vizcarra había sido clasificado al establecimiento penitenciario Barbadillo, donde solo están recluidos los exmandatarios, y que garantizaba el respeto de sus derechos fundamentales y el estricto cumplimiento del régimen penitenciario, conforme a ley.
Fue ayer que el juez Jorge Chávez Tamariz dictó prisión preventiva por cinco meses contra Vizcarra para evitar que rehúya a una eventual condena en el juicio por el delito de cohecho pasivo propio, a raíz de los presuntos sobornos recibidos cuando fue gobernador regional de Moquegua entre los años 2011 y 2014.
"Contubernio político"
Según consignó EFE, tras la resolución y cuando Vizcarra ya estaba detenido, su cuenta en la red social TikTok difundió un pregrabado video de dos minutos de duración donde rechazaba su prisión preventiva.
"Hola, si estás viendo este video es porque han dictado detención preventiva contra mi persona. Esto ya lo sabía hace dos días, porque había una resolución que incluso estaba firmada dando este resultado porque esto no se trata ya de justicia, se trata de política", acusó el exmandatario.
"Hay un pacto mafioso que está gobernando el Perú desde las sombras y está copando todas las instituciones y poderes del Estado y ahora lo demuestra metiéndose al Poder Judicial", indicó Vizcarra, que según varias encuestas figuraba entre los primeros en intención de voto para las elecciones de 2026, pese a tener una triple inhabilitación impuesta por el Congreso.
Además, recordó en el registro que fue destituido en 2020 de la Presidencia de la República por el Parlamento, y en los últimos años, precisamente el Congreso lo ha inhabilitado tres veces y lo ha "sacado" del partido "Perú Primero" que él mismo fundó y con el que lideraba las encuestas de intención de voto.
Los detenidos en Barbadillo
Vizcarra se une a otros tres expresidentes que están recluidos en el Penal de Barbadillo: Alejandro Toledo, Ollanta Humala y Pedro Castillo.
Desde el 16 de diciembre de 2022 está en la prisión el expresidente Pedro Castillo, quien asumió el poder en 2021 y un año después fue destituido por acusaciones de un intento de golpe de Estado. Esto, porque además de disolver el parlamento, pretendió gobernar por decreto y convocar a una Asamblea Constituyente.
En 2023, la Fiscalía de Perú solicitó 36 meses de prisión preventiva para Castillo por los delitos de organización criminal, colusión y tráfico de influencias.
En enero de 2024 se le imputaron los delitos de rebelión contra los poderes del Estado y orden constitucional, abuso de autoridad y grave perturbación de la tranquilidad pública.
El segundo en ingresar fue el expresidente Alejandro Toledo (2001-2006), quien entró el 23 de abril de 2023.
Toledo cumple prisión preventiva tras ser declarado culpable por los delitos de colusión y lavado de activos en octubre de 2024 por los sobornos recibidos de la empresa brasileña Odebrecht.
La justicia peruana lo condenó a 20 años y seis meses de cárcel, lo que lo convirtió en el primer exmandatario de su país que cumple condena por el megacaso de corrupción de Odebrecht, el cual salpica a cuatro expresidentes.
En tanto, en abril de 2025 y por ese mismo caso, la justicia peruana dictó 15 años de prisión al expresidente Ollanta Humala (2011-2016), tras hallarlo culpable del delito de lavado de activos por recibir aportes ilegales de la constructora Odebrecht y del gobierno de Venezuela para sus campañas de 2006 y 2011.
Su esposa, Nadine Heredia, también fue condenada a 15 años de prisión por lavado de activos procedentes de la empresa brasileña. Sin embargo, tras el arresto de Humala, recibió asilo diplomático en Brasil, hasta donde viajó con su hijo menor en un avión oficial enviado por ese país.
Cabe mencionar que por el penal también pasó el exmandatario Alberto Fujimori (1990-2000), el primer presidente peruano en ser encarcelado tras su gestión, por los delitos de violaciones a los derechos humanos y corrupción.
Tras su extradición desde Chile a Perú, en 2007 fue condenado a 25 años de cárcel, pero en 2017 dejó la prisión de Barbadillo por un indulto humanitario, el cual luego fue anulado por la justicia.
Posteriormente, en 2023, el Tribunal Constitucional restableció el cuestionado indulto, liberándolo en diciembre. Meses después, en septiembre de 2024, falleció.
