Horas cruciales en Argentina: Claves de las elecciones legislativas que podrían marcar el futuro de Milei
Los comicios ponen en juego la gobernabilidad de los próximos dos años del presidente trasandino y la capacidad de su proyecto liberal para sostener el impulso económico frente al malestar social.
Este domingo 26 de octubre, Argentina vuelve a las urnas en unas elecciones legislativas que marcarán el pulso político de la segunda mitad del gobierno de Javier Milei. El mandatario libertario encara una prueba decisiva: obtener más poder en un Congreso donde su partido, La Libertad Avanza, sigue siendo minoría.
Mientras el oficialismo intenta capitalizar la caída de la inflación y los apoyos externos, como el reciente rescate financiero de Estados Unidos, la oposición peronista y una emergente tercera fuerza provincial aspiran a frenar su proyecto de reformas y redefinir el mapa político argentino.
A continuación, puedes revisar claves de las elecciones legislativas, que renovarán la mitad de los 257 diputados y un tercio de los 72 senadores en el Congreso.
Milei como ganador y perdedor
Milei revolucionó en 2023 el panorama electoral con un discurso antipolítica con el que cristalizó en su figura el hartazgo general.
En noviembre de ese año consiguió un contundente triunfo en las presidenciales con el 56% en el balotaje, pero su 30% de la primera vuelta lo dejó en minoría en el Legislativo.
El Congreso pudo frustrar así sus principales reformas y aprobar leyes que según el mandatario atentan contra el equilibrio fiscal, e incluso revertir vetos presidenciales.
Congreso argentino. | Wikimedia
El partido de Milei, La Libertad Avanza, no podrá obtener mayoría absoluta en las cámaras tras los comicios. Sin embargo, se considera un hecho que aumentará su magra base de 37 diputados.
Milei manifestó que conseguir un tercio de legisladores en cada cámara ya sería "un buen resultado" porque es el número mínimo para impedir la reversión de un veto presidencial.
Tres fuerzas van por las legislativas
El oficialismo se presenta solo o junto al partido de derecha PRO (macrismo), dependiendo de la provincia.
Esta alianza cristaliza una unidad legislativa en la que el PRO casi siempre acompañó al gobierno en las votaciones. Asimismo, el oficialismo recurrió a grandes figuras para liderar las papeletas, como el caso de los ministros Patricia Bullrich (Seguridad) y Luis Petri (Defensa), que aspiran a un cupo en el Senado y la Cámara de Diputados, respectivamente.
Enfrente está la oposición peronista (centroizquierda), que gobernó durante 17 de los últimos 23 años y que busca recomponerse tras la derrota de 2023 con candidatos como Jorge Taiana y Juan Grabois.
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, emerge como el nuevo líder de este espacio que tiene como referente a la dos veces presidenta Cristina Kirchner (2007-2015), hoy presa e inhabilitada por corrupción.
Gobernador peronista de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, durante cierre de campaña legislativa. | EFE
Una tercera fuerza intenta emerger y romper esta polarización: "Provincias Unidas", que agrupa a media docena de gobernadores y partidos desde la centroderecha hasta la centroizquierda, con candidatos como el exgobernador de Córdoba Juan Schiaretti.
"Peor que hace dos años"
El gobierno de Milei redujo drásticamente la inflación en su primer año de gobierno y en 2025 mantuvo esta tendencia a costa de reducir el gasto público y quitar subsidios que encarecieron el acceso a la vivienda, la salud y la educación.
"Estamos peor que hace dos años", lamenta Héctor Sánchez, un mesero de 62 años que trabaja desde hace más de 40 en el sector gastronómico.
"Este gobierno prometió mucho y no veo nada (...), no creó fuentes de trabajo", dijo Sánchez, quien votó a Milei en 2023 y ahora está indeciso: "No quiero volver a lo de antes".
Urna electoral argentina. | Gobierno de Argentina
El discurso antipolítica y anticorrupción se vio afectado por escándalos. El más reciente llevó a al diputado José Luis Espert, cercano a Milei, a renunciar a su candidatura por presuntos vínculos con el narcotráfico.
A este se suma el gran escándalo que protagonizó la hermana del mandatario, Karina Milei, luego de ser acusada de aceptar presuntos sobornos ligados a contratos públicos en la Agencia Nacional de Discapacidad (Andis), un organismo clave en la compra de medicamentos.
Además, poco antes, el mismo presidente se vio involucrado en un bullado escándalo, al promocionar la criptoestafa del token $LIBRA a través de sus redes sociales, respecto a la cual también se presentaron denuncias que afectaron a su entorno.
¿Cómo influye el rescate de EE.UU.?
Estados Unidos acudió al rescate de la economía argentina con una línea de crédito de 20.000 millones de dólares.
Presidentes Donald Trump y Javier Milei. | EFE
Lo anterior, viene acompañado de la promesa de otros 20.000 millones de privados e intervenciones directas en el mercado de divisas local para defender un peso que muchos analistas consideran sobrevaluado.
Los argentinos temen una devaluación después de las elecciones, que puede impactar negativamente en su poder adquisitivo.
Para Mauricio Monge, economista para América Latina en Oxford Economics, el auxilio de Washington "no es suficiente para contrarrestar la creciente probabilidad de que los resultados electorales impidan reformas adicionales".
¿Cambio de estrategia?
En la recta final de la campaña, Milei insultó menos a opositores y periodistas, tendió la mano a los gobernadores y dio muestras de empatía con los argentinos "vulnerables", que "aún no han sentido en su realidad" el "éxito" de su gobierno.
Javier y Karina Milei en acto de cierre de campaña legislativa. | EFE
Su tono se moderó cuando su partido perdió por casi 14 puntos en unos comicios regionales clave, su peor derrota electoral desde que asumió la presidencia de Argentina. ¿Pero Milei tiene margen para la practicidad poselectoral?
Cabe recordar que en aquella oportunidad, su partido, La Libertad Avanza, fue derrotado por la oposición peronista en los comicios para legisladores provinciales de la región electoral más grande del país, la provincia de Buenos Aires.
"Quizás el pragmatismo de Milei esté funcionando, que esté haciendo acuerdos temporales para una reforma menos radical de lo que le hubiera gustado", explicó Gabriel Vommaro, politólogo del centro de investigación del Conicet.
"Pero me cuesta pensar que un Milei normalizado tenga algo para ganar en términos de popularidad", agregó.
Congreso argentino. | Wikimedia
Gobernador peronista de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, durante cierre de campaña legislativa. | EFE
Urna electoral argentina. | Gobierno de Argentina
Presidentes Donald Trump y Javier Milei. | EFE
Javier y Karina Milei en acto de cierre de campaña legislativa. | EFE
