Camila Lucero, El Mercurio
SANTIAGO.- Tras casi dos meses en toma, el Instituto Nacional fue desalojado este viernes por sexta vez. El Centro de ex alumnos del establecimiento educacional criticó este tipo de comportamiento y señaló que las tomas "no constituyen un acto legítimo de emitir opinión".
En un comunicado, el presidente de los ex alumnos, Mario Benavides, manifestó que "la toma de un colegio o escuela es por definición un acto de fuerza que no constituye un medio legítimo de emitir opinión, ni menos forma parte del contenido fundado del derecho a manifestarse".
"Es más bien un comportamiento antijurídico que no respeta los derechos de los demás, aún cuando su materialización hubiere sido promovida por una mayoría de los estudiantes", agregó.
Benavides manifestó que las tomas no contribuyen a un mayor fortalecimiento de la educación pública, "por el contrario promueve la baja en la calidad de la enseñanza, ya que sostenida en el tiempo, dificulta la normal entrega de las materias del conocimiento por parte de los educadores".
"No se debe confundir lo lícito de la protesta social con el empleo de mecanismos donde se emplea la fuerza y la violencia", indicó el presidente del centro de ex alumnos del Instituto Nacional, y llamó a recordar las consecuencias de la toma en el Internado Nacional Barros Arana que quedaron plasmadas a mediados de junio luego del desalojo de sus estudiantes.
Por lo mismo, Benavides, hizo un llamado a los estudiantes a "deponer estas formas de expresión ya que existen otros canales que contribuyen de mejor manera a reivindicar legítimas aspiraciones".
También solicitó a la alcaldesa de Santiago y a las autoridades del colegio a "evitar la permisividad respecto a estos actos y hacer prevalecer el bien común.
Finalmente, llamó a los profesores a "constituirse en un actor más de la educación cívica, con la experiencia del saber y la historia" y a los padres y apoderados a "conversar con sus hijos sobre la educación pública y los mejores medios para alcanzar una formación de calidad".
