VALPARAÍSO.- Desde Valparaíso la Presidenta Michelle Bachelet despidió al buque científico "Cabo de Hornos" de la Armada de Chile, con el que se estudiará el parque marino de las Islas Desventuradas, el más grande de América.
"Detrás de esta expedición hay un esfuerzo país contundente y coherente", señaló la Mandataria y aseguró que durante el periodo de sesiones de la Asamblea General de la ONU se discutió sobre las amenazas que enfrentan actualmente los océanos.
"Mencioné que debemos crear más áreas marinas protegidas, pero no basta con sólo crearlas, sino con una administración, monitoreo, control y vigilancia, que sean sólidos y robustos", agregó.
Ubicado a 910 kilómetros de Caldera, el parque marino de las Islas Desventuradas consiste en 300.035 kilómetros cuadrados de rica flora y fauna marina, donde el 72% de las especies de peces son exclusivos o endémicos de la zona.
Conocer esta extraordinaria diversidad en detalle es el objetivo de la primera expedición nacional denominada "Cimar 22" (Cruceros de Investigación Marina en Áreas Remotas) que ejecuta el Comité Oceanográfico Nacional (CONA), dependiente de la Armada.
La expedición
En 1574 el marino español Juan Fernández descubrió las islas San Félix y San Ambrosio, también conocidas como las Islas Desventuradas, en su búsqueda por una ruta alternativa de navegación entre Valparaíso y El Callao.
Recién en 2013 se realizó el primer acercamiento a unas de las áreas más desconocidas del planeta. Este miércoles comienza una nueva.
Así, Bachelet, junto a la ministra (s) de Defensa, Paulina Vodanovic, y al Comandante en Jefe de la Armada, el almirante Enrique Larrañaga, visitaron el buque para despedir los 43 marinos y 25 científicos que irán en la expedición.
La travesía en el "Cabo de Hornos" se extenderá por 35 días y, gracias a la tecnología del buque, se podrá obtener una imagen tridimensional del fondo marino, así como muestras de agua y fondo a diferentes profundidades.
En la instancia, el almirante Larrañaga señaló que "estamos conscientes que ésta es una tarea de largo aliento y no exenta de complejidades, pero tengo la íntima convicción que este crucero es el inicio de una fructífera sucesión de actividades científicas en el área del parque marino".
Por su parte, el comandante del buque, el capitán de navío Carlos González, explicó que la unidad cuenta con dos ecosondas multihaz, equipos que "permiten conseguir un mapeo completo del fondo marino en tres dimensiones, con la finalidad de determinar la morfología y geología en los alrededores de las islas y montes submarinos"
Además, el "Cabo de Hornos" deberá detectar los puntos más adecuados para emplear el robot submarino embarcado por Oceana Chile, capaz de operar a profundidades de hasta 550 metros, transmitiendo en directo su señal de video.
El biólogo marino Carlos Gaymer, director del Núcleo Milenio de Ecología y Manejo Sustentable de Islas Oceánicas (Esmoi), en su calidad de jefe de crucero, explicó que "como no podemos proteger algo que no conocemos, las once investigaciones que se llevarán a cabo están orientada al conocimiento de las especies, junto con elaborar una línea base detallada de este nuevo parque marino".
