SANTIAGO.-
Luis Rojas Lara, guía de caminata del parque nacional Huascarán, situado en la provincia peruana de Huaylas, dice que "era inminente" que a
Cristóbal Bizzarri (23) y
Gabriel Navarrete (32) los encontraran fallecidos, ya que estuvieron 10 días incomunicados cuando se dirigían a escalar el nevado Pirámide de Garcilaso ubicado en la Cordillera Blanca.
Según cuenta a Emol desde dicha urbe del departamento de Ancash, a 468 kilómetros al norte de Lima, los jóvenes "habían salido con poca comida. En el mejor de los casos podrían haber sufrido un accidente".
Rojas supo que los chilenos estaban desaparecidos porque el domingo 30 de julio se encontró con dos amigos de ellos que iban subiendo a buscarlos. Al bajar, dio aviso "a la policía en la ciudad de Caraz, al Departamento de Alta Montaña".
Si bien desconoce las causas del deceso, comenta que "una avalancha es lo más común" que ocurre en esta parte de la Cordillera de Los Andes. "Las cimas son bastante pronunciadas, tienen un porcentaje alto de grados que pueden ser entre 60 y 90, entonces eso hace que sea más complicado un ascenso o un descenso y que pueda ocurrir un riesgo de avalancha o de resbalón".
Pese a que "el clima está bueno" en la zona porque está en temporada seca y con poca nieve, "es una montaña difícil y bastante técnica. Hay que ser muy expertos para escalar, no cualquiera puede subirla".
La primera parada obligatoria que deberían haber hecho los jóvenes es en la Laguna Parón, a 32 kilómetros de Caraz, donde hay un refugio. Esto queda a 4.200 metros de altura.
"Legalmente, estos muchachos deberían haber subido con un guía oficial de alta montaña, pero lamentablemente ellos al parecer han subido solos", lamenta el especialista.
Además, asegura que en el lugar no hay una situación de control total para que los montañistas suban solos y que "por eso a veces se toman la libertad de ir solos".