Acciones en conjunto que incluyan esfuerzos por parte de los municipios, el Ministerio de Obras Públicas y el trabajo con los ciudadanos. Ese es el punto de partida con el que las autoridades de la región Metropolitana buscan trabajar en la disminución del consumo de agua, en atención a la sequía que afecta al país.
Es por ello que el ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, encabezó esta mañana una reunión con 11 representantes de municipios reconocidos como "grandes consumidoras de agua", entre los que se incluye La Reina, Peñaloén, Las Condes, Santiago, Pudahuel, Lo Prado, Lo Barnechea y Providencia.
El plan busca aunar esfuerzos para que esas comunas logren reducir en un 10% el consumo del recurso hídrico, entre los que destacan tres ejes principales: áreas verdes, edificios municipales y centros educativos. Esto incluye riego durante la noche a parques o evitar pérdida de agua en los sanitarios o cañerías, entre otros.
La diferencia de consumo "tiene que ver, por un lado con los ingresos y con el tipo de vida que tiene cada comuna, es decir, si tiene preponderancia de casas o departamentos"
Ministro Moreno
Consultado por Emol respecto al desglose de las cifras, el secretario de Estado sostuvo que en promedio en Santiago existe un consumo de 170 litros por habitante al día y "hay diferencia en el consumo tanto directo de las municipalidades y las que consumen las familias. Tiene que ver, por un lado con los ingresos, y con el tipo de vida que tiene cada comuna, es decir, si tiene preponderancia de casas o departamento", sostuvo.
El acalde de La Reina, José Manuel Palacios, sostuvo la idea general es que se unan los conocimientos que tiene cada municipio en una mesa que ponga a disposición esas herramientas, especialmente ante el riesgo "y la posibilidad real de racionar el consumo de agua si es que no tomamos medidas ahora".
Importancia de no reducir áreas verdes
Uno de los principales focos de atención y que marcó un consenso entre los alcaldes participantes del acuerdo, fue la idea de preservar las áreas verdes. Esto, porque el Ministro apuntó a que es necesario tener mayor criterio con el riego, sin necesidad de sacrificar la existencia de los mismos.
"Esto no apunta a tener menos áreas verdes, sino que más eficientes y adecuadas al clima que Santiago ya está teniendo y la que tendrá a futuro". Por eso, es importante, dijo el Secretario de Estado, poner atención en cómo se está regando.
Por su parte, el alcalde de La Reina aseguró que el consumo de agua en su comuna es menor al promedio, pero existe un plan de expansión, especialmente en áreas verdes, pues "tenemos un parque de cerca de 300 hás que estamos forestando y eso trae consigo gasto de recursos de agua", sostuvo.
En tanto, la alcaldesa de Peñalolén, Carolina Leitao, se sumó a la reflexión, planteando que dentro de las metas concretas, está la necesidad de pensar en cómo "teniendo y buscando tener áreas verdes en nuestra comuna, no dejamos construir áreas verdes para hacer más eficientes el consumo de agua".
Consultada por los plazos para llegar a la meta de reducción, la edil fue enfática en señalar que "la crisis es hoy, y por lo tanto no podemos ponernos plazos demasiado largos. Las conductas individuales las podemos cambiar a partir de hoy día, esta es una crisis que está pasando hoy y no nos va a dar tiempo".
Diferencias en el consumo de agua según zona
El alcalde de Puente Alto, Germán Codina apuntó a las grandes diferencias que existen en cuanto al consumo de agua en distintos sectores de la capital, destacando que "en la zona de Aguas Andinas, donde está Puente Alto, el promedio es de 22 metros cúbicos por familia, mientras que en la zona de la empresa de Manquehue es de 94 metros cúbicos".
Ante ese panorama, destacó que "habemos municipios donde nuestra política de generación de áreas verdes ha sido fundamentalmente para revertir la inequidad territorial que existe, porque en otras comunas tienen los recursos los vecinos para asistir a algún club con piscinas, pero tenemos otras comunas donde los vecinos necesitan ir a los parques municipales".
Por eso, también enfatizó en la necesidad de avanzar en reducir el consumo domiciliario, "es ahí donde aprieta el zapato y hace falta políticas más robustas, de la mano de programas educativos".
