La presidenta del Senado, Adriana Muñoz (PPD), aseguró que se está buscando un mecanismo para que se puedan restituir los más de $200 millones pagados en exceso a un grupo de funcionarios de la Corporación.
Esto luego de que El Mercurio revelara que se realizó un pago en exceso tanto de sueldos líquidos como de impuestos a la renta de 42 funcionarios vigentes y 11 retirados, los que en total suman una diferencia de $208.913.576.
Según señaló el medio, basándose en el informe de la auditoría externa e interna realizada por la Corporación y que fue entregada el pasado 26 de agosto a la comisión de Régimen Interno, se hizo para evitar una merma en el sueldo líquido de 42 funcionarios y para eso se estableció un pago adicional para cubrir los tributos, lo que les permitía recibir la remuneración completa fuera de impuestos. La dificultad estuvo en que se sobreestimó el impuesto, lo que produjo el margen a favor.
Ante eso la timonel del Senado puntualizó que “esto no es ningún escándalo” y que se trató de una “falla” cuya responsable es “una empresa consultora externa que hace los cálculos de las fórmulas de pago”.
"Fue un error de una empresa que ya está siendo sumariada y que hizo un mal cálculo y que los funcionarios no tienen ninguna responsabilidad en esto. Es un error de esta empresa que está siendo sumariada. Y por cierto, siempre que ha habido un error y hay un aumento que no corresponde en el pago de sueldos, por cierto que tiene que buscarse el mecanismo de restitución, pero aquí los funcionarios no han tenido ninguna responsabilidad", sostuvo.
Consultada sobre si existe una obligación de los funcionarios de devolver estos dineros, la senadora Muñoz indicó que "es lo que estamos estudiando, la fórmula". Y agregó que se inició una mesa de trabajo entre la presidencia, la vicepresidencia, la secretaría y las asociaciones de funcionarios “para analizar todo el impacto que va a tener sobre ellos estas modificaciones que hay que hacer a raíz de la auditoría que ha hecho esta consultora”.
Diferencias con el secretario
La presidenta del Senado evidenció además sus diferencias en la forma de liderar la Corporación con el secretario general, Raúl Guzmán. Especialmente en el proceso de modernización que se trabaja en la institución, contexto en el que se ordenó esta auditoría que reveló la diferencia del pago de sueldos.
Esto sumado al proceso que enfrenta el abogado y ex fiscal metropolitano Sur luego de ser sorprendido comiendo en un restaurante pese a la prohibición de funcionamiento por la cuarentena.
"Como mesa venimos recién conociendo esta situación y es por eso que yo he insistido muchas veces, antes incluso de asumir la presidencia del Senado, y es la diferencia que tengo con el secretario, que creo que aquí lo importante es trabajar con los funcionarios. Los funcionarios deben participar activamente en el proceso de modernización, en conocer claramente cuál va a ser el impacto de estas decisiones en su condición laboral y remuneracional", dijo.
De hecho aseguró que "si el proceso de modernización se va a demorar, que se demore, pero yo no me voy a dejar presionar por filtraciones en los diarios de acelerar el proceso de modernización como pueden querer otros sectores. Esto se va a hacer con los funcionarios en forma participativa".
Eventual formalización de Guzmán
En el mismo sentido reconoció la "incomodidad" personal que siente respecto al secretario quien ya fue multado por la seremi de Salud Metropolitana y podría ser formalizado por el Ministerio Público por acudir al restaurante.
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Es muy incomodo y para varios senadores y senadoras también, ahora las decisiones que hay que tomar no las puedo tomar ni yo sola, ni el vicepresidente, ni la mesa, sino que esto depende de Régimen Interno", dijo.
La senadora señaló que se está a la espera de conocer la decisión de la justicia para analizar la situación del ex fiscal. "Régimen interno tendrá que decidir, en esto les quiero decir que es una decisión colectiva, no la puede tomar solo la mesa, pero en su mérito lo analizaremos cuando esto suceda".
