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Figuras de la ex Concertación ante gobierno de unidad de Lavín: "Debe ser un acuerdo entre partidos, si no es una aventura"

En conversación con Emol, Soledad Alvear y Mariana Aylwin coincidieron en mirar de forma escéptica la propuesta. En tanto, Jaime Ravinet y Francisco Vidal no la desestimaron de plano.

17 de Septiembre de 2020 | 08:03 | Por Felipe Vargas Morales, Emol
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Jaime Ravinet, Mariana Aylwin, Soledad Alvear y Francisco Vidal analizaron la idea del edil.

Emol.
"¿Estarían dispuestos a apoyar a alguien que si llega al gobierno va a ampliar y no va a gobernar solo con ustedes?", fue la pregunta que dejó abierta el alcalde de Las Condes y principal presidenciable de Chile Vamos, Joaquín Lavín, al insistir sobre su idea de convocar a un gobierno de unidad nacional para el próximo periodo.

La propuesta del edil generó eco en la coalición oficialista, donde algunos dirigentes y parlamentarios ya mencionaron algunos nombres que podrían ser incluidos en una eventual administración de esas características, mencionando entre ellas a figuras como Soledad Alvear, Mariana Aylwin, José Joaquín Brunner o Francisco Vidal.

Sin embargo, la iniciativa de Lavín generó escepticismo entre los aludidos. El primero en referirse al tema fue Vidal, con quien el jefe comunal ha formado una influyente dupla mediática. Al respecto, dijo que "si es Presidente y nos dice a los opositores, quiero acuerdos sobre que Chile sea un estado social de derechos, yo firmo".

No obstante, en entrevista con La Segunda, aclaró que no participaría en un eventual gobierno "porque hay que respetar la soberanía de los chilenos. El que gane tiene que convocar al otro lado a ponernos de acuerdo en cinco o seis cosas", junto con subrayar que "un gobierno de unidad nacional en la historia de Chile no existe".

En la misma línea, la ex canciller Soledad Alvear, señaló a Emol que "en lo personal, creo que es importante participar cuando se cree en quien va a ser Presidente de la República y se tenga una propuesta respecto a este tema, respecto a qué ideas proponen al país. Y en ese contexto, no estaría disponible por dos razones".

"Una, es que no quiero ocupar otros cargos de responsabilidad política, fui tres veces ministra, ocho años senadora y creo que fue suficiente. Adicionalmente, insisto, yo tendría que ser partícipe de un gobierno con el cual comulgara con su Presidente, lo que no es el caso", enfatizó.

Una visión similar planteó la ex titular de Educación, Mariana Aylwin, quien indicó a este medio que la única forma de que una idea como la de Lavín sea viable es que sea un acuerdo entre partidos o bloques. "Un gobierno de unidad nacional se basa en un pacto entre partidos políticos, no con personas", subrayó.

"Entonces, no sé bien en qué está pensando él, porque si él está pensando en agregar personas que han militado en otros partidos políticos o que son de otros partidos políticos o son independientes que representen sensibilidades distintas, creo que ese no es el camino", añadió la actual líder del movimiento Progresismo con Progreso.

Aylwin explicó que “uno puede ver por ejemplo en Alemania cómo la CDU llega a acuerdos con la socialdemocracia para poder gobernar. Pero sin los partidos políticos no creo que haya posibilidades de generar esa gobernabilidad necesaria para un gobierno que sea apoyado realmente con peso en el Parlamento”.

"Debe ser un acuerdo entre partidos o con grupos que tengan representación parlamentaria. Si no, no tiene sentido, es una aventura y creo que eso tendrá que clarificarlo el alcalde Lavín, a qué se está refiriendo, porque no creo que un gobierno tenga más capacidad de gobernanza incorporando personalidades sueltas", manifestó.

La mirada de quien cruzó la frontera

Una de las escasas experiencias sobre la inclusión de figuras políticas con distinto signo o mirada política para poder ampliar la base de apoyo se dio en 2010, cuando el Presidente Sebastián Piñera convocó al ex ministro e histórico militante de la DC, Jaime Ravinet, a formar parte de su gabinete al mando de la cartera de Defensa.

En ese contexto, el también ex alcalde no ve con malos ojos la propuesta de Lavín dado que a su juicio "la crisis que hemos vivido a partir de octubre del año pasado, agravada por la pandemia y los temas pendientes hacen plenamente justificable converger en un gobierno de unidad".

"Pero esa unidad más que en torno a una persona, tiene que ser en torno a un programa para los próximos cuatro años, que pueda ser ejecutado y realizado en un clima de convergencia nacional y que lo encabece quien sea la persona más adecuada. En tal sentido, me parece una buena idea la de Joaquín Lavín", señaló.

En esa línea, Ravinet expresó que "el ideal es una gran convergencia de los partidos con más espíritu democrático, menos extremista, pero también requiere una convergencia social importante, que este expresada en los gremios tanto laborales, como empresariales y las universidades".

Consultado sobre cuál fue su experiencia como un político ajeno a la mirada ideológica del gobierno que lo convocó, el ex secretario de Estado respondió que "no quisiera hacer una comparación, porque más importante que la relación de las personas es que aquí haya un compromiso de convergencia en torno a un programa".

A su juicio, dicho programa debe ser "de emergencia para los próximo cuatro años en el que ojalá pudieran concordar todos los partidos de centroizquierda, de centro y centroderecha, aislando a los extremos que obviamente van a estar en contra, como el Frente Amplio, los comunistas y los partidos de ultraderecha".

"Por eso, más importante que las personas es que hubiera un acuerdo programático, en el cual hubiera un compromiso de trabajo común. En cuanto a la persona, ya veremos quién lo encabeza, pero lo más importante es concordar y tener la mayoría en el Parlamento para no vivir la dicotomía que hemos visto en los últimos años", señaló.
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