La Sala del Senado aprobó en general y por amplia mayoría el proyecto que permite que
el apellido de la madre pueda anteceder al del padre, en la inscripción de un hijo o hija ante el Registro Civil. De ser aprobado, Chile se uniría a la lista de países que permiten esta opción, siguiendo los pasos de Portugal, Italia, México, Argentina, entre otros.
La iniciativa quedó en condiciones de ser revisado en particular por la comisión de Mujer y Equidad de Género.
La senadora RN Marcela Sabat, una de las impulsoras, mencionó a Emol cuáles son algunas de las principales causales de esta iniciativa. "El proyecto establece la elección de común acuerdo qué apellido va primero, y, en caso de desacuerdo, va el del padre primero. Para las madres solteras el proyecto no establece ninguna modificación especial, y en eso tendremos que trabajar, pero sí facilita el proceso para que cualquier adulto pueda cambiarse el apellido".
La cultura de los apellidos en el mundo es distinta en cada país, de hecho en algunos no existe un consenso sobre cuál debería ir primero. Es más, existen naciones que por ley
el apellido de la mujer se pierde al contraer matrimonio, por lo que es obligación usar el del padre, tal como lo establece la
Constitución de Estados Unidos.
Sin embargo, existen países en los que se busca la igualdad o eso es lo proyectaron al momento de legislar sobre la libertad frente al orden de los apellidos. Un ejemplo de esto es Portugal, nación que establece en su Código Civil que los hijos podrán usar cualquier apellido, mientras sea una decisión de mutuo acuerdo entre los padres. En el caso de que no se logre, será un juez el que determine cuál será el orden.
¿El del padre o el de la madre?
Al igual que en Portugal, en Italia se propuso el uso de los dos apellidos y que los padres eligieran el orden. Fue la ministra de la Familia de aquel entonces, Rosy Bindi, la que promovió reformas del derecho de familia. Por esto, la Constitución italiana, estableció por ley que si un hijo nace dentro de un matrimonio son los padres quienes deciden.
Argentina mantiene una legislación muy parecida a la de Portugal e Italia. Desde 2015 que el país trasandino puso en igualdad de condición al padre y la madre al momento de elegir qué apellido va primero. En el caso de que Chile apruebe este proyecto, una de las causales sería similar: ambos padres deciden cuál antecede.
Siguiendo la misma línea, en 2013 Uruguay impulsó un proyecto con el fin de tener una "sociedad más inclusiva". Fue así que se firmó el decreto que permitía modificar el registro de nacimiento. Este consiste en que si solo uno va a registrar, se opta primero por el apellido del padre y luego el de la madre. Si van los dos, pueden elegir el orden que ellos quieran.
"El proyecto establece la elección de común acuerdo que apellido va primero, y, en caso de desacuerdo, va el del padre primero"
Senadora Marcela Sabat
En Suecia ocurre algo muy distinto a lo de Uruguay. Si bien los padres tienen libertad sobre elegir cuál de los apellidos va primero, en caso de no existir un consenso entre ambas partes, se registra al hijo o hija con el de su madre, según lo establecido por la Constitución del país.
México es uno de los países en Latinoamérica más avanzados en esta materia. En 2016, la Suprema Corte de Justicia de la Nación determinó que los padres podían elegir el orden que deseaban para los apellidos de sus hijos. Además, en 2017 se estableció que los padres podían colocar sus apellidos maternos.
La legislación que mantienen estos países sobre esta materia fue la que inspiró a los impulsores de la iniciativa para definir las nuevas causales a tramitar. "Este es un proyecto simple, pero que tiene un gran impacto cultural, al entregar justicia para muchas madres en el país. La legislación comparada siempre ha sido una herramienta importante a la hora de crear nuevas normativas, y en este caso, este proyecto pondrá a Chile a nivel de países como Francia, Alemania, Austria, Estados Unidos, los Países Bajos, entre otros", aseguró la senadora Sabat.
